Mandato de Mas en el inicio

Después de salir del Passeig de ses Fonts de Sant Antoni, la carrera se lanzó al llegar a las rampas de Cala Tarida. Eran un par de kilómetros de contrarreloj que computaban en la clasificación general de la ronda que organiza IbizaSport. Allí, por los nervios de la cronometrada, se produjo una caída sin más consecuencias que algún raspón y varias ruedas que tuvieron que repararse.

Por delante, Lluís Mas, del Caja Rural, se impuso en el primer tramo cronometrado del día, que no figuraba en el libro de ruta, ya que se había pactado con los corredores que se anunciaría minutos antes de su inicio para aumentar la emoción. El resto de la ruta dejó estampas preciosas. La costa sur ibicenca se fue desplegando al paso ciclista. Los colorines de los maillots contrastaron con el verdor de los campos y el azul del Mediterráneo postveraniego. Tras saludar al islote de es Vedrà se alcanzó el avituallamiento. El refrigerio estaba situado en ses Salines. Junto al viejo cargador de sal, los corredores dieron cuenta de un surtido de frutas, pastelitos, frutos secos y barritas energéticas, además de agua y líquidos isotónicos para reponer fuerzas.

Las llanuras de Sant Jordi fueron el preludio de la Serra Grossa, la última gran dificultad del día. En el segundo tramo cronometrado del día, ya enfilando hacia Sant Antoni, el mejor tiempo fue nuevamente para Mas. Con su registro de 11’14’’, en el tiempo acumulado fue el ganador de la etapa. Por debajo de 12 minutos también pararon el crono Miquel Carrió y los ibicencos José Márquez y Vicente Roig, segundo, tercero y cuarto en vísperas de la decisiva etapa de hoy en Sant Rafel. En féminas, fue Mayalen Noriega la más rápida con una marca de 14’04’’.

Después del segundo sprint, el camino de es Regueró fue el último empujón para llegar al Passeig de ses Fonts y despedir 69 kilómetros de ciclismo a 25 grados centígrados. Con la Vuelta a Ibiza, el verano se alarga hasta el 12 de octubre en medio de una fiesta cicloturista.