Simebal ve «preciptado» empezar a vacunar en enero. | DANIEL ESPINOSA

El delegado del Sindicato Médico de Baleares (Simebal) en Menorca y médico de urgencias, Claudio Triay, consideró ayer que es «precipitado y optimista» que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, asegure que el plan de vacunación contra la COVID empezará en enero del próximo año 2021.

Según declaraciones de a Europa Press, «ojalá fuera posible» que el plan de vacunación de la COVID empezará en enero. Y es que, advirtió, «la mayoría de vacuna se encuentra aún en fase tres, una fase experimental, en la que se han hecho pruebas pero a un número limitado de personas, por lo que falta cobertura».

En esta línea, consideró que las afirmaciones del ministro Illa, quien este sábado en una entrevista en Rac1, recogida por Europa Press, aseguró que el plan de vacunación contra la COVID-19 empezará en enero de 2021 y no será de carácter obligatorio para toda la población, son «un poco precipitadas y optimistas».

Esperanza
Las declaraciones del ministro de Sanidad «son un intento de trasladar esperanza a la población», apuntó Triay, quien insistió en que «hay que ser prudentes, porque, de momento, los resultados que se tienen son preliminares».

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Asimismo, sobre la intención del Gobierno de «tener a la mayoría de la población inmunizada» entre los meses de mayo y julio del mismo año, según dijo Illa, el delegado de Simebal en Menorca puntualizó que no cree que hasta mediados de 2021 se posible «una vacunación masiva».

Por otro lado, sobre la afirmación del ministro de Sanidad de que la vacunación no será obligatoria y las palabras de la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, apuntando que «la obligatoriedad de las vacunas no es legalmente posible», Triay aseguró que es un tema «muy complicado porque afecta a la libertad individual y a la salud pública».

Al respecto, defendió que «desde el punto de vista científico debería de ser obligatoria, siempre que sea eficaz y no tenga efectos secundarios, para evitar así poner en riesgo a otros».

«Hay que concienciarse de que la obligatoriedad no iría contra de la libertad de nadie. No hay que tener tanto miedo a la vacunación», insistió.