El fotógrafo catalán Josep Maria Subirà donó ayer al Ayuntamiento de Vila una colección de cien postales en color realizadas por él durante sus primeros años en la isla. El acto, que se llevó a cabo en Can Botino, contó con la asistencia del propio Subirà; de la alcaldesa de Vila, Marienna Sánchez-Jáuregui, y del primer y segunda teniente de alcalde, Joan Daura y Lina Sansano, respectivamente. Las imágenes, las primeras postales en color de la isla, según Subirà, se incorporarán al Arxiu d’Imatge i So del Consistorio.

«Con este tipo de imágenes se puede hacer un estudio de la evolución urbanística de eivissa que aporta muchos datos», señaló Sansano, quien recordó que Subirà ya había comentado la cesión con Fanny Tur, directora del Arxiu Municipal.

Para Sánchez-Jáuregui, se trata «de un regalo magnífico de un valor incalculable».

El propio Subirà reconoció estar «a la caza y captura de las imágenes que faltan». La más antigua de las entregadas ayer data de 1956.