Biel Barceló y Fanny Tur, ayer, en la rueda de prensa que ofrecieron en Eivissa. | Pep Tur

Ya advirtió de entrada Fanny Tur que el cálculo era difícil de efectuar, pero la que fue directora de la sección balear del Institut Ramon Llull (IRL) cifró ayer en unos 250.000 euros el montante económico del que pudo beneficiarse la cultura pitiusa por parte del IRL en los dos años y medio en los que ha formado parte de él, hasta que el Ejecutivo balear encabezado por José Ramón Bauzá ha decidido acabar con dicha relación.

Tur dio esta cifra durante la rueda de prensa que ofreció ayer por la mañana en una céntrica cafetería de Vila junto al portavoz en el Parlament balear del Grup Parlamentari PSM-IV-Entesa i Més per Menorca, Biel Barceló.

«Ninguna otra institución ha hecho un esfuerzo similar», afirmó Tur relatando que el IRL ha permitido a 70 pintores y escultores, 11 formaciones musicales y a 20 escritores y profesores dar a conocer su obra en las principales capitales europeas y otras ciudades de todo el mundo, así como participar en ciclos de conferencias simposios.

Barceló viajó a Eivissa para dar a conocer la proposición no de ley que llevarán a la Comissió de Cultura, Educació i Esports en la que «insta al Govern a mantenerse en el Consorci Institut Ramon Llull». En dicho documento, sus promotores, que esperan que el PSIB se sume y vote a favor del mismo, recuerdan que en febrero de 2011 todos los partidos de la cámara autonómica adoptaron por unanimidad un acuerdo por el que se reconocía «el trabajo del Consorci Institut Ramon Llull, subrayando el valor para la promoción y la expansión de nuestra cultura» y en el que se apostaba «por su consolidación y potenciación».

En este sentido, Barceló calificó como «muy grave» que el actual equipo de Gobierno haya roto dicho acuerdo, abandonando el IRL por razones ideológicas y poniendo como excusa «la deriva política y social de Catalunya».

«La cultura sufre como nunca la crisis. Es una época en la que los consells aplican recortes drásticos en cultura, recortando programas y cerrando equipaciones, por lo que pedimos que se respalde la industria cultural», dijo Barceló.

Herramienta

En este sentido, Tur apuntó que este Govern «no cree en la cultura» y se lamentó profundamente del hecho de que desaparezca una herramienta «que ayudaba a dar a conocer que en las Pitiüses hay una industria cultural con el nivel suficiente para ser mostrada al mundo. Una industria cultural que forma parte del tejido económico y laboral». La exdirectora del IRL en Balears añadió que la relación de la Comunitat Autònoma con el ente cultural era «la única balanza fiscal positiva para Balears, porque de un 12% de aportación al presupuesto total, 1.250.000 euros los dos primeros años de un total de 13.000.000 de euros, obtenía un 20% o un 25% del mismo en presencia».

Tanto Barceló como Tur no quisieron dejar de lado las fotografías de caza aparecidas recientemente del conseller balear de Turisme, Carlos Delgado, para preguntarse retóricamente qué ofrecía mejor imagen para el archipiélago, las instantáneas o las inauguraciones de exposiciones y la celebración de conciertos.