Una de las obras del artista ibicenco que se exponen desde ayer en la madrileña García Galería.

La sala madrileña García Galería inauguró el pasado fin de semana la exposición En la zona gris, un proyecto de la comisaria Virginia Torrente en la que participa Adrián Martínez (Eivissa, 1981) junto a Belén Rodríguez (Valladolid, 1981), Christian Bagnat (Cipolletti, Argentina, 1971) y el colectivo danés Allan, Steffen y Robert, compuesto por Steffen Jorgensen (Lageskov, 1983), Robert Kjaer Clausen (Nyborg, 1979) y Allan Nicolaisen (Viborg, 1982).

«La zona gris es un lugar no identificado con claridad, un espacio en el que flotan meteoritos y naves tripuladas, con destino a… no se sabe dónde, ni tampoco su fecha de llegada. Pero también la zona gris está en la tierra, en lo oscuro de un bosque en la noche, en el interior de una casa abandonada… incluso dentro de nuestro cuerpo. No deja de ser una zona indeterminada de búsqueda, donde el relato es más ficticio que real, donde la verdad no sabemos hasta dónde llega, o si es un truco más de los que usa el artista, para sumergir al espectador en esa zona gris», apunta Torrente, para añadir que «los artistas participantes en esta exposición comparten un interés común por lo oculto, lo que se esconde detrás, lo que flota en la estratosfera… ya sean ideas, basura abandonada por las expediciones humanas llevadas a cabo en el espacio exterior, o sensaciones interiores propias.

La interpretación de la zona gris llevada a cabo por cada uno de ellos es tan abierta como el mundo, compuesto de fuerzas y materia, inestable, listo para explorar, impactar… o gravitar plácidamente».