Mario Camus. | Europa Press

El director de cine y guionista cántabro Mario Camus (Santander, 1935) ha fallecido a los 86 años en Santander, según ha informado este sábado la Academia de Cine en una publicación en su cuenta de Twitter.

El cineasta recibió el Goya de Honor en el año 2011, con el que la Academia de Cine quiso reconocer su labor de toda una vida en el mundo cinematográfico.

Camus dirigió, entre otras películas, 'La Colmena'; 'Los Santos Inocentes'; 'Sombras en una batalla'; 'La ciudad de los prodigios'; o 'El color de las nubes'.

"Fallece el cineasta Mario Camus en Santander. Autor de clásicos de nuestro cine como 'Los santos inocentes', 'La colmena', 'Los días del pasado' o 'Esa mujer'. Recibió el Goya de Honor en 2011", ha lamentado la Academia de Cine.

La Academia de Cine ha destacado que, alejado de las corrientes de moda y seguidor de impulsos, Mario Camus era un resistente que, desde principios de los cincuenta, contaba historias para él y para otros cineastas.

Goya al Mejor Guión Original por 'Sombras en una batalla', recibió el Goya de Honor en 2011, trofeo que recogió homenajeando al oficio del cine "que te hermana con los maestros de la luz y de la música".
El nombre de este director y guionista cántabro siempre va ligado al de Miguel Delibes y Camilo José Cela, pero debutó con una adaptación de Daniel Sueiro y también trasladó al lenguaje audiovisual a Ignacio Aldecoa, Jorge Semprún y Rafael Azcona, entre otros. Una labor en la que sintió cómodo y en la que, además, contó con el beneplácito de los productores, "que al tener gran respeto por las obras editadas, no intentan cambiarte ni una coma".

Miembro de una generación en la que figuran Carlos Saura, Basilio Martín Patino, Miguel Picazo, Francisco Regueiro y José Luis Borau, Camus firmó 29 películas -'El prado de las estrellas' fue la última-, fue el coguionista de 'Roma', el autor del libreto de 'Los golfos' y dirigió varias series de televisión -'Curro Jiménez', 'Fortunata y Jacinta', entre otras-.

El director hizo largometrajes con Raphael y Sara Montiel, y en dos de sus producciones, 'Sombras en una batalla' y 'La playa de los galgos', abordó el tema de ETA.

La Academia de Cine ha señalado que Camus "se sentía muy querido por su familia cinematográfica, una familia que sentía muy fiel". Sin elegir entre películas, guiones relatos de televisión, medio para el que firmó también 'La vuelta de El Coyote' o 'La forja de un rebelde', "porque cada obra tiene su propia vida durante el rodaje", Camus era perfeccionista: "Lo que más me molesta es cuando has fallado. Yo estoy contento con lo que he hecho, unas películas me han salido bien y otras menos bien. Mi intención siempre ha sido trabajar bien".

"Aparte de su talento incuestionable, de su sensibilidad con los actores, su capacidad para gestionar proyecto complejos en tiempos difíciles y de haber dejado un puñado de obras maestras, Mario Camus ha sido un cineasta especialmente querido por sus compañeros. Los actores, los técnicos y sus colegas de profesión siempre vieron en él un referente por su elegancia y por su actitud generosa y solidaridad", ha manifestado el presidente de la Academia, Mariano Barroso, tras conocer el fallecimiento del cineasta.