Las empresas de Balears no divisan una mejoría clara para su situación económica. De momento, los llamados ‘brotes verdes’ no han llegado a las Islas y según los diferentes sectores empresariales, no se espera una ligera recuperación hasta el año que viene. “O al menos eso deseamos”, apunta esperanzado el presidente de Pimeco de Mallorca, Bernat Coll.

En las últimas semanas, Govern y medios de comunicación se han hecho eco de la gran ocupación hotelera de este verano en el Archipiélago, pero esta situación no se ha traducido en un incremento económico significativo para toda la oferta complementaria, ni tampoco para otros agentes que, desde 2008, ven disminuir sus ganancias o han tenido que echar el cierre. Baste recordar que en el último año, 2.000 comercios de Mallorca han cerrado sus puertas, una situación que también afecta a Menorca y Eivissa.

Así pues, se mantiene la tendencia de destrucción de empresas o, lo que es lo mismo, continúan bajando la barrera de manera definitiva. En lo que llevamos de año, en Balears se han disuelto 680 empresas constituidas como sociedades. La cifra de 680 coincide con la que se dio durante el mismo periodo de 2012, lo que significa que no hay una clara recuperación. Así lo constata el Estudio sobre Demografía Empresarial publicado por Informa D&B y realizado a partir de los datos del Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme). En él se detalla la destrucción de empresas por sectores, donde el comercio, la construcción y las inmobiliarias han sido los más afectados con 112, 115 y 150 empresas cerradas respectivamente.

SOCIEDADES. Si sumamos los datos recogidos por Informa a partir de 2011, constatamos que en dos años y ocho meses, Balears ha perdido 2.605 empresas inscritas como sociedades anónimas, limitadas y comandatarias. Por el contrario, si observamos los datos recogidos en la Seguridad Social vemos que en el Archipiélago hay 43.019 empresas cotizando, lo que supone 133 empresas menos que en 2011, cuando hubo una reducción del 0,9%.
A esta situación, hay que añadir las empresas que están en concurso de acreedores, una cifra que en agosto alcanzó los 197 concursos, lo que supone una subida del 24% respecto al mismo periodo de 2012 (ver gráficos adjuntos). Cabe reseñar que las cifras en Balears son muy similares a las del conjunto del Estado donde los concursos también se han incrementado un 26%.

Los datos preocupan a la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB) que destaca sobre todo el aumento de empresas en concurso “pues aunque muchas veces este procedimiento es un mal necesario, es síntoma de la delicada situación de muchos negocios tras años de recesión”, explica su presidente, Josep Oliver.

PAGOS. “Esperamos que si la economía mejora, estas empresas que entran en concurso no quiebren, que sigan cotizando, resuelvan su situación y puedan hacer frente a los compromisos adquiridos con los acreedores”, y a su vez se pueda reducir “el número de disoluciones de sociedades mercantiles”, añade Oliver.

Por su parte, el vicepresidente de CAEB Eivissa-Formentera, Joan Bufí, cree que estos datos vienen dados por “el cambio de tendencia” a raíz de la crisis económica, que ha supuesto “un cambio estructural empresarial”. Bufí se muestra optimista y asegura que en Balears “sabemos sobrevivir a los tiempos adversos” por lo que “nuestro instinto de supervivencia nos da la capacidad de reaccionar que han demostrado muchas empresas”. Aun así afirma que no cree en ‘brotes verdes’ sino en el “trabajo del nuevo tejido empresarial”.

¿BOTELLA MEDIO LLENA? Y es que como sucede en estos casos, hay lecturas muy diferentes sobre los datos económicos y empresariales que nos acontecen. Todo depende del sector que analice los resultados y cómo le afecte. Así, podemos ver que aunque la destrucción de las empresas sea un hecho demostrado, también debemos resaltar que en lo que llevamos de año se han creado 2.021 sociedades nuevas.

La cifra, que de por sí podría parecer positiva, hay que analizarla con cautela ya que esta subida viene de la mano del sector de la hostelería y el comercio, justo coincidiendo con la temporada turística. “Tendremos que esperar a que finalice el año para poder estudiar los datos concretos, porque ahora llegará el invierno y, en Balears ya se sabe que los inviernos son muy fríos económicamente hablando”, recuerda el máximo responsable de Pimeco.

Coll asegura que en las Islas los comercios turísticos o del centro histórico de Palma han trabajado bien durante los meses de verano, pero hay otro tipo de comercios, en los pueblos o en los barrios periféricos de las ciudades, que no se recuperan “y difícilmente cuando cierran, vuelven a abrir”.

“SIN DETERMINAR”. El estudio de Informa apunta que de las 2.021 sociedades constituidas en lo que llevamos de año, 505 de ellas están codificadas como sector “sin determinar”. Esto se refiere que en el acto de constitución “la definición utilizada abarca tantas actividades que nos es imposible codificar una actividad concreta”, apuntan desde el grupo. Los expertos añaden que en algunos casos, la constitución de algunas sociedades no implica directamente una actividad empresarial constante, ni mucho menos la contratación de asalariados.

Por otra parte, el sector comercio ha crecido en 324 establecimientos en lo que llevamos de año, mientras que las actividades inmobiliarias se sitúan en las 284 empresas (ver gráficos adjuntos). A la cola de la constitución de empresas encontramos el sector de agricultura e industrias extractivas, y los agentes dedicados a temas de educación con 10 sociedades nuevas cada uno. Debemos añadir también que la tendencia al alza del sector construcción e inmobiliarias también se dio en 2012 y 2011, por lo que no sorprende que también se incremente este año. Eso sí, el sector de la construcción solo se ha incrementado un 3,62% en edificación privada. La nota más positiva la hallamos al referirnos al capital invertido. En lo que llevamos de año en Balears se han invertido 66 millones de euros, un 36% más que en los ocho primeros meses de 2012.

Una de las apuestas para mejorar esta situación, según la mayoría de agentes empresariales, viene por la reducción de impuestos: “Especialmente en lo que concierne al IVA, en las cotizaciones a la Seguridad Social, y en los tributos autonómicos y tasas locales”, como recuerda Oliver.