Las víctimas de los sacerdotes pederastas belgas, medio millar según un informe revelado esta semana, pedirán indemnizaciones económicas a la Iglesia católica, informó la agencia Belga.

El abogado de las víctimas, Walter Van Steenbrugge, declaró que sus clientes buscarán justicia por la vía civil dado que la mayoría de delitos han prescrito (se cometieron en los años sesenta, setenta y ochenta).

El viernes se presentaron las conclusiones de la comisión Adriaenssens de investigación de abusos sexuales en el seno de la Iglesia belga, y reveló que 475 niños y niñas sufrieron abusos y de ellos 13 se suicidaron.