Fachada del edificio del Tribunal Supremo. | Reuters

El Tribunal Supremo ha dado la razón a un incidente de ejecución planteado por Iberdrola y ha obligado al Gobierno a refacturar todo el recibo de la luz a cerca de 29 millones de consumidores a partir de octubre del año pasado. A finales de diciembre, el Supremo había suspendido la bajada de peajes eléctricos en un 12% aplicada por el Gobierno en octubre para forzar una congelación de la luz. No obstante, la resolución era solo de aplicación desde el 22 de diciembre, fecha en la que se conoció la decisión del tribunal.

No obstante, en un auto el Alto Tribunal ha dado la razón a Iberdrola y considerado que la tarifa de último recurso (TUR) debe volver a calcularse para el conjunto del cuarto trimestre de 2011, y no sólo para una semana. De esta forma, las eléctricas tendrán que refacturar tres meses enteros de luz a los clientes, lo que, a la vista de que los peajes tienen un peso del 50% sobre el recibo, supone una presión al alza del 6% que los clientes no han pagado y deberían pagar ahora.

Endesa

A esta circunstancia se suman los autos conocidos ayer en los que el Supremo concede las cautelares solicitadas por Endesa e Iberdrola y considera insuficiente la subida del 10% de peajes de enero que permitió al Gobierno congelar la tarifa. De esta forma, no solo será necesario refacturar al cliente el último trimestre del año, sino la parte acumulada desde enero para que se recojan los costes regulados suficientes para evitar la creación de déficit de tarifa.

Las decisiones del tribunal acerca de la insuficiencia de las dos últimas revisiones de la luz se suman a una sentencia anterior en la que anulaba la congelación de la tarifa pactada en junio de 2010.