Harvey y Maddy Rovinsky son los propietarios de la cadena de joyas de lujo eutadounidense Bernie Robbins Jewelers, debido a que les llegó el momento de juvilarse y no tener familia heredera han decidido regalarle la tienda a sus empleados más fieles.
Aunque en un primer momento plantearon la opción de vender la compañía por falta de familiares a quien dejarles el legado, los Rovinsky finalmente decidieron no vender la empresa y dejarla a sus empleados más leales que llevan más de 30 años trabajando.
La decisión. «Hemos estado buscando una manera de continuar, de mantener empleados a personas realmente excelentes. Muchos de ellos llevan 30 años, 25, 20 años con nosotros. Así que son personas a largo plazo, son como una familia», explica Harvey a Fox News Digital.
Seguir el legado. Según cuenta Harvey, tras plantear la opción de vender la compañía, no encontraron a ningún candidato suficientemente cualificado para continuar el legado que Bernie Robbins, padre de Maddy, les había dejado en herencia.
La decisión. «Hemos estado buscando una manera de continuar, de mantener empleados a personas realmente excelentes. Muchos de ellos llevan 30 años, 25, 20 años con nosotros. Así que son personas a largo plazo, son como una familia», explica Harvey a Fox News Digital.
Seguir el legado. Según cuenta Harvey, tras plantear la opción de vender la compañía, no encontraron a ningún candidato suficientemente cualificado para continuar el legado que Bernie Robbins, padre de Maddy, les había dejado en herencia.
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