El sondeo electoral de Metroscopia, confeccionado sólo dos días antes de la convocatoria del 28-A, ofrece algunas de las claves que explican los motivos de la decisión del presidente Sánchez para adelantar los comicios generales. El PSOE mantiene un fuerte tirón frente al resto de adversarios políticos, distanciándose del Partido Popular y erigiéndose en claro ganador en las urnas. Este escenario es muy diferente al de 2016, en el que los conservadores cosecharon una victoria importante mientras ahora las sucesivas encuestas confirman una estabilización a la baja que le resta opciones para recuperar el Gobieno.

Vox llega con fuerza.
Uno de los aspecto más novedosos del trabajo de Metroscopia hace referencia al sostenido crecimiento de la derecha de Vox, una formación que crece en el conjunto del Estado a costa de la opción de Ciudadanos, que ha perdido casi cinco puntos desde el mes de diciembre del pasado año. El declive también afecta a Podemos, que no logra detener la pérdida de apoyos acentuada en los últimos meses. Frente al paisaje electoral que dibujan las encuestas, Sánchez ha decidido jugarse su futuro político a las futuras alianzas, pero siempre como eje principal de la negociación para revalidar su estancia en el palacio de la Moncloa. No puede pasar desapercibido el detalle de que Pablo Casado no logra remontar el PP y le debilita como adversario.

La posición de Ciudadanos.
La fuerta apuesta de Sánchez pasa por una necesaria reedición del acuerdo que ya mantuvo con C’s en la abortada moción de censura contra Rajoy, el pretexto de frenar el acceso al poder de la extrema derecha es un argumento poderoso que tendría el líder socialista para tratar de conservar el poder. De todos modos, queda por delante una durísima campaña electoral en la que quedan por despejar dudas importantes, en especial en lo que hace referencia al comportamiento de las fuerzas nacionalistas e independentistas.