Con una tasa de paro del 5,3 por ciento en abril, Balears encabeza las regiones con mayor creación de empleoen los últimos doce meses; la principal razón hay que buscarla en el adelanto de la temporada turística. El propio titular de la Conselleria de Treball, Iago Negueruela, no ha dudado en calificar de «extraordinarios» los registros obtenidos y que incluso podrían mejorar en los próximos meses a tenor del excelente comportamiento del sector servicios a partir del segundo trimestre. El excelente comportamiento del mercado laboral supone un importante alivio para las economías familiares, muy castigadas durante los años de la pandemia, y un importante revulsivo de cara a la reactivación del consumo interno.

Coyuntura muy favorable

La economía balear vive un impulso muy superior al previsto, en buena medida gracias a la demanda turística y que ha permitido avanzar la campaña de este año. La contratación laboral también se ha beneficiado de esta dinámica, hasta el punto de que hace semanas que se evidenciaba la falta de mano de obra especializada en hostelería y construcción; una situación denunciada por las patronales afectadas. La expansión está siendo un reclamo más para la llegada de trabajadores dispuestos a ocupar esta demanda creciente. El tiempo que se prolongará esta situación es una incógnita, pero ésta es la realidad que se vive en las Islas.   

Problemas vigentes

Justo es celebrar el descenso en la tasa de desempleo, del mismo modo que es inevitable recordar la perpetuación de cuestiones como el paro juvenil o ese grupo de desfavorecidos que integran las ‘colas del hambre’ frente a los comedores sociales. Romper con la cronicidad de determinados colectivos es un reto inaplazable, tal y como denuncian los grupos implicados en la asistencia social desde diferentes ámbitos. Ampliar la base para la creación de empleo debe ser un compromiso colectivo.