El paro sigue bajando y en Balears ahora mismo hay inscritas menos de catorce mil personas en las oficinas del Inem, un dato histórico y positivo. Sin embargo, no ha sido este pasado mes de julio un buen período para la creación de empleo, pues en el conjunto del país sólo descendió el paro en un 0'76 por ciento respecto al mes anterior, lo que deja el porcentaje de parados en el 8'9 por ciento en España.

Aquí, en las Islas, podemos felicitarnos, pues el nivel de desempleo es menos de la mitad que en el resto de la nación, 4'14 por ciento, aunque no podemos lanzar las campanas al vuelo estando, como estamos, en lo más alto de la temporada turística. Veremos al llegar el otoño cómo se encuentran las estadísticas.

Pese a todo hay aún catorce mil personas en las listas del paro. Aunque muchos se preguntan cuántos de ellos están realmente en apuros y cuántos camuflan situaciones de trabajo negro. Aun así, hay que analizar por qué en una comunidad como la nuestra, a la que no dejan de llegar inmigrantes para ocupar puestos de trabajo que nadie quiere, hay miles de personas que buscan un empleo. Quizá se trate de gente que sólo quiere ejercer determinados empleos que no se materializan, o personas con empleos temporales que periódicamente se apuntan y se desapuntan de las listas del Inem, o, finalmente, quienes de verdad no consiguen incorporarse al mercado laboral.

Para ellos "mujeres poco preparadas, hombres de cierta edad, discapacitados" el Govern balear ha puesto en marcha un proyecto que pretende conseguirles un empleo estable. No será fácil, deberán colaborar los empresarios y la sociedad entera, pero si lo logra nuestra Comunitat habrá dado un salto de gigante en la consecución de una verdadera calidad de vida para todos sus habitantes.