La digitalización está cada vez más presente en las empresas y administraciones de todo el mundo. Las compañías están cambiando el chip para evitar quedarse obsoletas y mantener su crecimiento a futuro. Las empresas tecnológicas están esforzándose en garantizar la continuidad de la productividad en este tiempo golpeado por la pandemia de la Covid-19.

Ya nadie puede negar que la inversión por la tecnología y la digitalización es una apuesta a seguro para el desarrollo de nuestra economía y sociedad. Fruto de ello es que las compañías tecnológicas están arrasando en el ranking de las empresas más valiosas del mundo, por delante de financieras, distribuidoras o petroleras. En 2020, el top 8 lo componen siete tecnológicas y solo una petrolera. De estas tecnológicas, la más valiosa es Apple, con 2,16 billones de dólares. El resto se lo reparten Google, Alphabet, Amazon, Facebook, Microsoft, Alibaba y Tencent.

En total suman más de 11 billones de capitalización bursátil. Por tanto, la importancia de acometer una transformación digital en la economía y sociedad va más allá de la coyuntura actual, marcada por la crisis del coronavirus, y se encamina hacia un futuro que a corto y medio plazo será digital. Como bien dice la directora general de Google España y Portugal, Fuencisla Clemares, la digitalización ha de ser la «espina dorsal» del comercio para ser competitivo, porque «los consumidores no entienden de fronteras, se mueven en el ecosistema digital buscando el mejor producto, con la mejor calidad y el mejor precio, indiferentemente del origen de la empresa».

Además, es importante que el Gobierno desarrolle programas de ayuda a las pymes para que puedan acceder a recursos para acelerar la digitalización en el corto y medio plazo. Estoy seguro de que la recuperación de la economía pasará por una mayor adopción de la tecnología.