Uno de mis bares favoritos estaba en la hoy polémica zona de Port de Can Nebot, en Cala Vadella. Lo llevaba una escocesa de sonrisa picta y deslumbrantes ojos verdes junto con su novio, que parecía jugador de rugby. Tenía vistas privilegiadas y a menudo, a la puesta de sol, pichaban arias de ópera cantadas por Pavarotti o la Sutherland (bálsamo para los oídos hartos del bakalao electrónico que impera en tantos garitos desde hace demasiado tiempo). En el pequeño embarcadero podías darte un baño alejado de masas playeras y luego subir de nuevo al bar, para brindar con una ginebra seca y resinosa como Xoriguer.
Opinión
Nostalgia de un bar
También en Opinión
- Govern y sindicatos acuerdan que las auxiliares de enfermería cobren un plus de 196 euros al mes
- Tres detenidos por blanquear 680.000 euros del narcotráfico con una empresa de reparación de embarcaciones
- Multazo de casi 300.000 euros por construir dos casas de madera en pleno parque natural de Ibiza
- Descubre cómo era Ibiza entre 1950 y 1980 a través de la mirada de Oriol Maspons
- «Soy de Ibiza, tengo trabajo y duermo en el coche por el precio de los alquileres»
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
OLEEE PRIMO tu si que SABES ,como la PRIMITA @MONTSE ,,, que no FALTE el ORO .ja .ja ja...