Consell de Formentera. | Archivo

Podemos se presenta por primera vez en las elecciones del Consell de Formentera del próximo 28 de mayo. En este artículo voy a intentar explicar por qué y para qué nos presentamos.

Durante los últimos veinte años, la población residente de Formentera –y en particular las personas trabajadoras– han visto menguar su poder adquisitivo a causa del aumento imparable del coste de la vida y especialmente de la vivienda.

En paralelo, la calidad de vida tan extraordinaria de nuestra isla se ha ido reduciendo por la gran masificación turística en verano.

Según nuestro análisis, la causa principal de esta pérdida de calidad de vida y de poder adquisitivo, que incluso está obligando a muchas familias a dejar su isla provocando un verdadero drama social, es el modelo turístico basado en el crecimiento constante que ha ido empobreciendo a la mayoría social durante las últimas dos décadas y que ha ido masificando y saturando nuestra isla.

Para ser más específicos, el alquiler turístico de viviendas –que originariamente estaban destinadas a ser hogares para las personas residentes– ha sido la causa directa y principal del encarecimiento brutal e inasumible del precio de la vivienda y del alquiler residencial, así como del aumento descontrolado de plazas turísticas que provocan la masificación veraniega.

Y si el alquiler turístico legal ha hecho mucho daño, todavía peores son los efectos del alquiler turístico ilegal, que campa a sus anchas mientras el Consell es incapaz de combatirlo pese a ser la administración competente.

Ante este panorama, Podemos se presenta para gobernar y hacer políticas destinadas a las personas trabajadoras de la isla, para la inmensa mayoría de quienes trabajamos y vivimos aquí. Queremos defender de una manera muy especial los derechos de las personas y familias residentes que no poseen propiedades en la isla, muchas de las cuales han venido de fuera de la isla y que son las más vulnerables ante los precios prohibitivos de la vivienda y también son las que padecen las sobrecargas de trabajo causadas por el número excesivo de turistas en verano, así como todos los inconvenientes de convivencia que ello conlleva. Durante el año 2021, con aproximadamente la mitad del turismo prepandénico, se ha demostrado sobradamente que se puede mantener el pleno empleo técnico con muchos menos turistas, y sin tanta necesidad de traer trabajadores de temporada que necesitan viviendas y que no las encuentran.

Por lo tanto, nuestro principal reto es abordar con determinación y valentía el gravísimo problema de acceso a la vivienda, y también blindar definitivamente la protección de nuestro territorio y paisaje porque esa es la única garantía de mantener el atractivo de nuestra isla como destino turístico en el futuro, para nuestros hijos e hijas.

Vamos a hablar claro, hay que poner límites al modelo turístico basado en el crecimiento ilimitado porque está acabando con el equilibrio social, económico y medioambiental de nuestra isla. Es un modelo fallido porque mengua la calidad de vida y el poder adquisitivo de las personas residentes, porque hace imposible tener una casa, y porque solo beneficia a unos pocos especuladores y a los grandes empresarios y propietarios de siempre, mientras ejerce una presión insostenible sobre nuestra población y sobre nuestro territorio y recursos naturales.

El error histórico del alquiler turístico en viviendas residenciales se tiene que cortar en seco: estamos determinados a erradicar toda la oferta de alojamiento turístico ilegal para devolver centenares de viviendas al mercado residencial, de dónde no deberían haber salido nunca. Porque las casas deben ser para vivir, no para especular.

También queremos aprovechar y mejorar nuestra ley de limitación de vehículos, el Formentera Eco, para aplicarla con rotundidad y acabar con la saturación del verano, que era su objetivo inicial y que no se está cumpliendo.

Para lograr una movilidad sostenible de verdad, vamos a necesitar un transporte público realmente eficiente y capaz de ser una alternativa real al uso de los vehículos privados y de alquiler. Gracias a la labor de Podemos a nivel nacional y autonómico los autobuses son gratuitos este año, pero nosotros queremos que sean gratuitos para siempre para las personas residentes, y que haya bonos para turistas que les eviten la necesidad de alquilar los coches y las motos que colapsan nuestras carreteras.

Una red capilar de carriles bici segregados y seguros, que conecten todos los núcleos urbanos y las principales zonas turísticas, también reducirá el número de coches y motos y sus emisiones tóxicas, junto con un sistema público de alquiler de bicicletas eléctricas y convencionales.

Podemos no tiene deudas con ningún banco, no tiene vínculos con ningún lobby, somos el único partido realmente libre e independiente que se presenta y por ende el único que puede realmente anteponer los intereses de la gente a los de los poderosos.

Por todo esto y mucho más nos presentamos a estas elecciones con ilusión y determinación.