No me puedo creer que tengamos que esperar a que se construya la nueva planta depuradora de aguas residuales de sa Coma para que se pueda instalar un nuevo emisario en la zona de Botafoc, de manera que Talamanca no se vea amenazada continuamente. Y no me refiero solamente a la cala, las playas y a la calidad de las aguas, sino que también hay que preocuparse por el sector hotelero, el de restauración y la calidad de vida de los residentes en la zona. Pues no señor, ahora dicen desde el Govern que habrá que esperar tres o cuatro años más para tener un nuevo emisario. ¿Y en el Consell insular y en el Ayuntamiento de Eivissa, qué dicen?

Y como hay más ‘Talamancas’ voy a recordar que la isla entera necesita nuevas depuradoras de aguas residuales en todos los municipios, y asimismo plantas desaladoras de agua de mar para garantizar un adecuado abastecimiento de agua potable, sin cloruros y siguiendo las directrices de la Organización Mundial de la Salud. La situación actual, sinceramente, es inaceptable y demuestra el ‘manfutismo’ con que se ha gobernado en los diferentes ayuntamientos durante decenios.
Por otra parte, hemos visto, una vez más, el desmadre que ha habido con los closing parties de algunas discotecas. No es solamente que hayan cerrado puertas cuando les ha dado la real gana, sino que además no han obedecido a los diversos requerimientos que han formulado los cuerpos policiales. Ahora bien, entiendo que los primeros culpables son los ayuntamientos, que carecen de unas buenas ordenanzas para regular horarios, aforos y volúmenes musicales y que permitan precintar un establecimnto sin tener que esperar a que se solucionan los recursos, jurídicamente debe haber un sistema para cerrar un local que quebrante la ley y que también permita aplicar unas sanciones acordes con la realidad. Es mucho dinero lo que está en juego, está claro, pero el bienestar común ha de sobrevolar por encima de los trapicheos y permisividad. En fin, señores alcaldes, tienen un largo camino hasta el inicio de la nueva temporada y esperamos de ustedes que solucionen los endémicos problemas que sufrimos.

Ecotasa

Todo indica que el Govern se ha salido con la suya, y me refiero a que la ecotasa se cobrará el año próximo en todos los alojamientos turísticos oficiales y en los cruceros. No sé cuántos millones de euros se van a recaudar, posiblemente unos 80, pero mucho me temo que vayan a parar a las arcas del Govern balear, que nunca se sabe cómo los repartirán ni a quién van a beneficiar.

Sinceramente, no estoy en contra de la ecotasa ya que en Europa y en los EE.UU. también la hay, pero sí digo que opino como Núria Marín, alcaldesa de l’ Hospitalet. Ni más, ni menos. Núria Marín reclama para los consistorios catalanes el 70% que se queda el Govern y decidir en qué se gasta el dinero. Ecotasa sí, pero con la garantía de que el dinero recaudado servirá para mejorar el ecosistema más cercano. Y otra cosa: la ecotasa puede ayudar a tener una ‘Ibiza Clean [limpia] Island’, que de entrada la necesitamos mucho más que una ‘Ibiza Smart [inteligente] Island’. Lo de smart, sinceramente, huele a huida hacia adelante.

‘Manca finezza’

He leído que en los primeros días de la transición política, Giulio Andreotti visitó España como jefe del gobierno italiano. Se le pedía con insistencia que opinara sobre la vida política española y se limitó a contestar que «manca finezza».

Naturalmente, hay que señalar que se refería a falta de disposición al intercambio y de capacidad estratégica. Así que la clase política ahora en el poder debería ir pensando en la manera de resolver los problemas que sufrimos.

Curiosamente, hace muy pocos días que el presidente Mariano Rajoy manifestó: «Tenemos el problema de Cataluña y con diálogo y fineza lo iremos resolviendo». A ver si es verdad, presidente.