Vídeo a la llegada tras la expedición. | Irene Arango

En la mañana de este miércoles Silvia Earle, Maximiliano Bello, Waldo Martín de Mission Blue, Gador Muntaner, entre otros invitados, han visitado parte de la pradera de Posidonia que está reconocida como Patrimonio de la Humanidad. Aniol Esteban, director de Fundación Marilles, y Cristinza Ozores, cofundadora de la Asociación Vellmarí, ambos miembros del Equipo Promotor del Foro Marino, han ejercido como anfitriones de esta visita.

Sylvia Earle ha destacado que hay que proteger y cuidar de la Posidonia porque es futuro para el Mediterráneo.» Islas Baleares, -según la bióloga marina- tienen que ser un referente de esperanza para la protección y la regeneración del mar Balear». Por su parte, Maximiliano Bello, experto en política pública oceánica y asesor ejecutivo de Mission Blue ha declarado que «El Mediterráneo es el centro de la cultura y de la civilización occidental, Sin embargo, hoy en día es uno de los lugares más amenazado del planeta. Si no podemos salvar el Mediterráneo, será difícil salvar el Océano. España y toda Europa se está quedando muy atrasada en materia de protección de los mares y el océano».

Aniol Esteban ha destacado que» el Foro Marino no es simplemente debate y palabras, sino pasar a la acción. Ayer se plantearon cuestiones claves para nuestras islas como son la ampliación de las áreas marinas protegidas, la mejora de la gestión pesquera, la protección de la diversidad y la limpieza de las aguas. Baleares, España y el resto del Mediterráneo tienen una deuda con su mayor activo que es el mar y la costa».

Sylvia Earle, en Ibiza: «Las Baleares deben de ser un punto de esperanza para el Mediterráneo»

Para Esteban, este activo del cual depende la prosperidad económica y el bienestar de los ciudadanos, tanto residente como turistas, tiene que ser protegido colectivamente, desde todos los sectores. «Ha llegado un momento en el que se está empezando a ver y a visibilizar que hay una unión y una comunión de todos estos sectores que piden más compromiso político con la conservación marina, tanto a nivel balear como a nivel nacional. Esperamos que todo este movimiento y todas estas propuestas que se han hecho para crear santuarios marinos, transformar la flota pesquera en la más sostenible del Mediterráneo, limpiar las aguas, proteger hábitats y especies, se acompañe, sobre todo, de la inversión de un mínimo de un 1% del presupuesto público en conservación marina y que esta petición sea escuchada».