El conseller de Medio Ambiente de Formentera, Antoni Tur, aseguró ayer que los muertos de más de 2,5 toneladas de peso que se están instalando en s’Estany des Peix son exclusivamente para la instalación del pantalán.
Desmentía de esta forma el conseller las informaciones publicadas por Periódico de Ibiza y Formentera en las que se aseguraba que se estaban instalando este tipo de muertos como alternativa a los anclajes ecológicos en determinadas zonas de este enclave dada la dureza del nicho marino. «Se hicieron unas catas en el perímetro de s’estany y en todas ellas se consiguieron los 2,40 metros de material blando que se necesita para anclar las boyas ecológicas», insistió, «los muertos de hormigón autorizados son exclusivamente para el pantalán».
Sin embargo, tanto las imágenes como las declaraciones de los trabajadores que están ejecutando el proyecto de regulación de fondeos en s’Estany des Peix dicen todo lo contrario.
Y es que, según denunciaron fuentes consultadas por este periódico, los muertos que está utilizando el Consell para anclar barcas de entre 4 y 6 metros pesarán entre 2,5 y 3 toneladas, «lo que sería suficiente para una embarcación de 18 metros». Además, confirmaron que el proyecto que se está ejecutando para la regulación de este espacio del Parque Natural de ses Salines incluye tres tipos de muertos para las diferentes escalas de embarcaciones.
Reconocieron a su vez que en la zona sur de s’estany sí que han podido clavar bastantes anclajes ecológicos porque, al contrario de lo afirmado por el conseller de Medio Ambiente, es el único lugar donde han encontrado calado suficiente de arena o barro para clavarlos, pero en el resto de s’estany les ha sido imposible porque hay roca debajo del fango que hace imposible estos anclajes de bajo impacto.
Desde el grupo Sa Unió indicaron que, con la información que disponen, lo que se está ejecutando no coincidiría con el proyecto inicial, «y eso es un problema», indicó el portavoz de la coalición, Lorenzo Córdoba.
«Ya se ha llenado de hormigón la isla en los últimos años de gobiernos de GxF y PSOE», subrayó, «y ahora están llenando de hormigón s’estany, y eso no se puede tolerar». En este sentido, aseguró que «vamos a investigar qué es lo que está ocurriendo realmente» y en caso de que no se corresponda con el proyecto «vamos a pedir que se restablezca la situación a como estaba previamente y las correspondientes responsabilidades políticas».
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