De la noche a la mañana apareció el pasado fin de semana una nueva casa varadero cerca de la zona boscosa de sa Canal en ses Salines. Así lo explica una familia que acude habitualmente a tomar un baño en esta zona de la isla. «El sábado por la tarde estuvimos nadando, y al día siguiente, al volver, nos encontramos con que habían levantado una casita», dice la bañista consultada por este periódico.

Al parecer, la proliferación de casas varadero en el litoral pitiuso es ya bastante corriente. Las guaridas de las antiguas embarcaciones de pesca se han convertido hoy en día en un nuevo espacio de ocio, donde los fines de semana se concentran muchas familias para disfrutar del mar y, sobre todo, de una buena comida a cobijo del sol.