Algunas madres acompañadas de sus pequeños se acercaron ayer a Vara de Rey.

La Associació Balear d'Alletament Matern (ABAM) se congregó ayer en Vara de Rey donde instaló un punto de información con paneles y fotografías en el que se recogieron las impresiones y vivencias de partos de madres y donde, por medio de un manifiesto, se reivindicó «un nacimiento respetado» tanto para los derechos de la mujer como para el niño, así como una ampliación a dos años de la baja maternal para mejorar el vínculo madre-hijo. «No estamos en contra ni de la epidural, ni de la cesárea, ni de la intervención cuando sea necesaria, porque no es que las prácticas sean buenas o malas, sino oportunas o inoportunas», precisó la matrona y miembro de ABAM, Ana Amor, mientras mantenía a su bebé de tres meses en brazos. Un nacimiento que, según aseguró, lo llevó a cabo junto a su compañera y matrona Britta Sandten en el cuarto de baño de su casa ya que «es el lugar donde me sentía más cómoda» y destacó que «lo fundamental es que la madre se sienta segura y relajada, porque sino es cuando puede producirse la depresión postparto y se ha comprobado que también puede afectar al carácter del pequeño».

Se trata de una iniciativa llevada a cabo por primera vez en la isla y que defiende las recomendaciones establecidas por la Organización Mundial de la Salud en la Semana Mundial por el Parto Respetado, algo que ya se lleva a cabo en otros países como Alemania o Suecia. En este sentido, entre los puntos que se trataron en el manifiesto se destacó el hecho de poder elegir el lugar del parto, la posición más adecuada y que es diferente en cada mujer, y una atención más cercana y humana con la futura madre. «Cuando en el pasado día de la matrona preguntábamos a las madres qué le pedían a su comadrona todas coincidieron en los mismo: confianza», aseguró Ana Amor. Por otra parte, los asistentes pudieron disfrutar de una divertida e irónica actuación de teatro juvenil a cargo de la AAVV de Sa Colomina en la que se representó la historia de una gallina que quería poner un huevo.

Irene Luján
La ABAM hizo especial hincapié en el nacimiento del bebé por sus propios medios ya que, según aseguraron, «cuando se corta el cordón inmediatamente en lugar de esperar a que deje de latir se lleva al niños a una serie de rutinas violentas, así como cuando se le niega la leche materna con sucedáneos o se le quita rápidamente del calor de la piel de la madre».