La escasez de suelo urbano es especialmente notoria en el municipio de Palma.

Durante el año pasado se produjeron 2.039 operaciones de compra venta de solares urbanos en Balears, lo que supuso un descenso del 26'36 por ciento respecto al año anterior, según informa el Ministerio de Vivienda.

El valor de las operaciones de compra venta de suelo urbanizable ascendió globalmente hasta los 753'6 millones de euros, lo que supuso en este caso un descenso 20'52 por ciento respecto al año precedente, pese a que el precio del metro cuadrado registró un crecimiento del 15 por ciento y se situó en 323'47 euros.

Colegios profesionales y patronales de las construcción atribuyen la caída de las ventas y el incremento del precio del metro cuadrado a la escasez de suelo urbano disponible, especialmente en Palma y municipios de su área metropolitana.

Rústico como alternativa
Ante esta situación, grandes promotores mallorquines y peninsulares ya van tomando posiciones y han adquirido miles de metros en suelo rústico no urbanizable en el municipio de Palma a la espera de futuras recalificaciones urbanísticas, caso de Drac, Fer, Ibercón y otras de las más importantes. Se trata de una estrategia de futuro, dado que estiman que a medio plazo gran parte de estos solares serán recalificados para dar respuesta a las necesidades de crecimiento de la ciudad de Palma y experimentarán una revalorización exponencial.

Según han informado empresarios del sector y el Colegio de Parejadores y Arquitectos Técnicos, estas grandes promotoras están interesadas en todo tipo de terrenos, aunque los más cotizados son los solares rústicos lindantes con terrenos urbanizados o urbanizables.

De hecho, tal y como ya informó este periódico, se han producido recientemente operaciones de compra venta de grandes extensiones de terreno en la zona Son Sardina, en la zona situada detrás del Hospital de Son Dureta cercana a la urbanización de sa Teulera, en el interior de la barriada del Molinar o en terrenos periféricos situados al final de Arxiduc Lluís Salvador.

Esta situación explica que el suelo rústico balear sea uno de los más caros del conjunto de España.

Personas jurídicas
De las 2.039 operaciones de compra venta de suelo urbano contabilizadas por el Ministerio de la Vivienda el año pasado en las Islas, en 940 casos los adquirientes fueron personas jurídicas o empresas, lo que supone el 46 por ciento del total.

Las compras de suelo urbanizable por parte de personas jurídicas o promotores ascendieron en su totalidad a 448'6 millones de euros, lo que supuso en este caso un peso del 59'5 por ciento del valor total de las ventas registradas, lo que indica que las empresas pagaron más que los particulares para adquirir solares urbanizables.