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La consellera insular de Política Social i Sanitària, Patricia Abascal, quiso ayer transmitir un mensaje de tranquilidad a los padres de los alumnos del taller ocupacional de discapacitados de sa Coma después de la agresión que se produjo a un trabajador discapacitado por parte de dos jóvenes del centro de menores. Abascal explicó que se ha garantizado la seguridad de los chicos porque el guardia jurado que está durante las 24 horas en el centro de menores se trasladará al centro ocupacional durante las mañanas, que es cuando acuden los discapacitados. Asimismo, se instalarán rejas en las ventanas para evitar problemas de roturas de cristales.

«No volveremos a permitir que pase una cosa así», remarcó la consellera, que recordó que el chico agredido era un trabajador de la brigada del Consell y no del centro ocupacional. También explicó que ya se ha recriminado su actitud a los dos chicos del centro de menores que le apalearon. Asimismo, la consellera se ha puesto en contacto con el agredido para pedirle que denuncie los hechos ante la policía, ya que desde el Consell no pueden hacerlo. «Él se encuentra bien, no ha tenido que ser hospitalizado, pero está asustado y es normal, yo también lo estaría», aseguró Abascal, que señaló que quiere hablar con los padres de los chicos del centro ocupacional, ya que en ningún momento se han dirigido a ella.

La consellera recalcó que están poniendo medios para garantizar la seguridad y para que no se produzcan problemas ahora que allí también se va a instalar un campus universitario. Reconoció que ahora mismo los chicos del centro de menores pueden campar a sus anchas y recordó que se trata de un centro abierto y no de reforma, con lo que no les pueden encerrar.

Sin traslados

«Lo que haremos es trabajar con ellos para evitar determinadas actitudes, pero la solución no es encerrarlos ni trasladarlos a otro lugar», aseguró Abascal, que está convencida de que cuando haya más servicios en sa Coma habrá más control y los chicos no tendrán el recinto para ellos solos.

Por su parte, el conseller del PP Vicent Serra aseguró ayer que «faltan recursos técnicos y de seguridad» en el centro de menores de sa Coma. El conseller señaló que lo ocurrido «es un tema grave; evidencia una mala gestión por parte del Consell». Serra, que en la anterior legislatura fue responsable del área social, precisó que «siempre ha habido problemas pero se ha podido reconducir». Ahora, sin embargo, «está desbordado y no se han puesto los recursos para que no sucediera».

Recordó que el centro dependía antes de Intress, una empresa de trabajo social, y ahora ha pasado en manos del Consell, «que no ha sido capaz de controlar la problemática, es mala gestión». Recordó que «se han duplicado el número de cargos de confianza en la Conselleria respecto a la anterior legislatura y se le ha escapado el tema del centro de menores». Aclaró que el PP no está en contra de la ubicación en sa Coma, «pero con el personal suficiente para controlar los problemas». El conseller dijo que en el centro se han acometido tres cambios a la vez: el traslado el local de Can Pep Xicu a sa Coma; el modelo ha pasado a ser mixto y la tutoría del centro ha pasado de Intress al Consell. Tampoco está de acuerdo de acuerdo con la decisión de instalar rejas, «es hacer las cosas en plan chapuza».

Serra insistió en el aumento de los cargos de confianza recordando que «dicen que no tiene dinero pero le aseguro que yo sabía donde quitarlo». El PP presentará dos preguntas al pleno sobre si el centro tiene todos los recursos ya que aseguran que no dispone de licencia de actividad del ayuntamiento de Sant Antoni y sobre el tipo de contrato del personal de Intress, «si se le ha dado plazas de interinos sin ningún tipo de bolsín».

Los padres de discapacitados de la asociación Sa Colometa mantendrán una reunión antes de tener un encuentro con la consellera de Política Social i Sanitària, Patricia Abascal, la semana que viene. «Hasta que no se solucione el tema de la seguridad no llevaremos a los niños», dijo ayer Vicent Tur. El presidente de la asociación asegura que soluciones como la instalación de rejas en el pabellón «no les parece adecuada», ya que incluso la agresión al discapacitado fue en el exterior del pabelllón donde está el taller de sa Coma.