PEP MATAS-GERMÀ VENTAYOL

Una comision judicial llevó a cabo ayer un registro en el 'palacio' de la calle Sant Feliu, en Palma, que es propiedad del matrimonio Matas-Areal. Horas antes, y mediante un exhorto del Juzgado de Instruccion 3 de Palma, otra comisión judicial se desplazó al piso de la calle Don Ramón de la Cruz, en Madrid, donde se llevó a cabo otro registro. Oficalmente el inmueble es propiedad de Bartolomé Reus, hasta el pasado 31 de octubre presidente del consejo asesor de GESA-ENDESA en Balears. Pero para la Guardia Civil Reus es el testaferro de la familia Matas-Areal.

El registro en el 'palacio' se inició pasadas las cuatro de la tarde, hora en la que llegaron a la calle Sant Feliu el juez Castro, el fiscal Pedro Horrach y los guardias civiles que investigan el patrimonio de Matas, encabezados por el capitán de la Policia Judicial. También estuvo presente el abogado Rafael Perera y tres de los agentes que había participado en el registro de Madrid. Las diligencias se prolongaron durante más de cinco horas.

A lo largo de mas de cinco horas se recorrieron las distintas dependencias del 'palacio', haciendo un inventario de los objetos que hay en su interior, en especial elementos de decoración, obras de arte y joyas. Al finalizar el registro judicial, el abogado de Jaume Matas, Rafael Perera, explicó a los medios de comunicación que «se han revisado todas las dependencias de la vivienda y numerosos documentos. Ademas, y por diferente peritos -uno de ellos fue el arquitecto Rafael Balaguer que valoró en 2 millones el importe de la reforma realizada en el inmueble y el otro una experta en obras de arte- se ha realizado una valoración de la decoración y las obras de arte». En opinión de Perera «las diligencias practicadas eran presumibles» dada la imputación del ex president en el 'caso Palma Arena'.

«Sólo se han incautado varios documentos y se ha intervenido un televisior para averiguar de qué modelo se trata», advirtió Perera, el cual no ocultó que «los agentes trataron de localizar una caja fuerte en la vivienda, pero ésta no existe».

A modo de resumen comentó que «no se ha encontrado nada relevante» en el registro del domicilio de Jaume Matas, aunque fuentes judiciales comentaron que «hemos encontrado lo que se esperaba». Por último, el letrado confirmó que «el señor Matas no tenía conocimiento previo de este registro».

El registro que se llevó ayer a cabo en el piso de Madrid, situado en la cuarta planta del 105 de la calle Don Ramón de la Cruz, trata de confirmar la mayoría de datos que se han aportado en la investigación. Por ejemplo, el hecho de que, nada más entrar en el inmueble, en los primeros meses de 2005, y pese a que se trataba de materiales de mucha calidad, se cambiaron todas las puertas por otras de mayor valor. También se tiene constancia de la contratación de servicio doméstico, y de que se compró todo el mobiliario y aparatos electrodomésticos.