La temporada turística de 2010 se caracterizará en Balears por una mayor explotación hotelera del tipo 'todo incluido', que crecerá hasta situarse en el 23 ó 24 por ciento del total de plazas turísticas, situándose por encima del 20 por ciento que supuso el pasado verano. También destacará porque continuarán los cierres en la oferta complementaria, desde restaurantes hasta tiendas de souvenirs.

Eso es lo que sugieren los datos que maneja el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de las Illes Balears (UIB) Eugeni Aguiló, quien precisó que, en términos generales, será «un poco mejor» que la de este año, a pesar de que se acortará de nuevo el periodo de apertura de los hoteles y los visitantes que predominarán serán los de clase media y media-baja, con un poder adquistivo limitado.

El estudioso del turismo aclaró que esa previsión es válida sobre todo para Mallorca, porque «la situación en las islas pequeñas es más tremenda». Sin embargo, al menos uno de los principales touroperadores internacionales que operan en las islas sitúa su índice de crecimiento en 'all inclusive' en hasta el 30% para 2010.

Sin embargo, en un intento de no entrar en pérdidas, el próximo ejercicio reducirán su periodo de apertura «algunos hoteles más» de los que lo han hecho este año.