Informes de la Conselleria de Medi Ambient especifican que la ocupación de suelo protegido que prevé la ampliación del aeropuerto de Eivissa genera una afección «grave» al parque natural de ses Salines. Tal y como ya anunció en su día Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), estas obras supondrán la invasión de once hectáreas al sur del parque natural. Además, ocupa 15 hectáreas de zonas periféricas de protección en el nordeste y doce en el noroeste.

De hecho, desde Medi Ambient remarcan que los usos aeroportuarios que se contemplan no son «compatibles» con los objetivos del parque natural de ses Salines. Así lo advertían desde la Conselleria en el último informe emitido por la Comissió balear de Medi Ambient a principios de año. En este documento, del que sólo se había dado a conocer que desaconsejaba la ampliación por la reducción del número de pasajeros, se le recuerda a AENA que el Plan Territorial Insular de Eivissa contempla que todas las ampliaciones del aeropuerto deben compatibilizar el desarrollo aeroportuario, la planificación territorial y la protección ambiental.

El Plan Rector de Usos y Gestión (PRUG) del parque natural de ses Salines, asimismo, establece que queda «prohibida» la implantación de cualquier nueva infraestructura o equipamiento en el ámbito del parque «susceptible de perjudicar algunos de sus valores característicos». Concretamente, en el artículo 17 se especifica como infraestructuras o equipamientos prohibidos en el parque «los aeropuertos o helipuertos, así como los nuevos puertos comerciales y deportivos».

La directora del parque natural de ses Salines remarcó la semana pasada a este periódico que la ampliación del aeropuerto afecta mucho al parque, por ser una actuación «muy fuerte».

Uno de los grandes problemas de la ampliación es que justo al lado del aeródromo existen un conjunto de hábitats y especies incluidas en directivas europeas. De hecho, AENA contemplaba incluso algunas alternativas que Medi Ambient cree que son una «falta de consideración» por invadir zonas catalogadas como Lugar de Interés Comunitario (LIC) y Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA). Asimismo, podría haber afecciones en el torrente de sa Font, que desemboca en es Codolar.