El conseller balear de Medi Ambient, Gabriel Vicens, y el alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, Agustinet, inauguraron ayer la remodelación de la depuradora de Platja d'en Bossa, que ha costado 6,7 millones y que aumenta su capacidad de tratamiento en un 70 por ciento.

Según explicó el director general de Recursos Hídrics, Antoni Rodríguez, los principales elementos de la depuradora están dentro de construcciones cerradas. «Las depuradoras limpian, no ensucian, lo que pasa es que a veces las aguas sucias llegan tan deterioradas que la depuradora no puede limpiar del todo», indicó Rodríguez, que garantizó que con esta remodelación se «contendrán la mayoría de olores» y se producirá el «menor hedor posible».

De hecho, el alcalde de Sant Josep indicó que ya han recibido felicitaciones por parte de los vecinos. «Parece que funciona bien», remarcó Agustinet, que recordó que esta era una obra «largamente esperada» por parte de la gente de los alrededores.

El conseller remarcó que se trata de una «elevada inversión», necesaria porque la planta, construida en los años 90, se había quedado obsoleta. «Con estas obras se ha producido una mejora ambiental de la zona muy importante porque desprendía muchos malos olores, estaba saturada y ahora ha aumentado su capacidad en un 70% y puede dar servicio a una población potencial de 25.000 personas», remarcó Vicens, que quiso destacar la incidencia positiva que tendrá esta reforma en la calidad del mar de la zona, ya que la depuración terciaria introducida mejora «muchísimo» la calidad del agua que se vierte al litoral. «En Eivissa tenemos 15 banderas azulas, tres más que el año pasado y estamos trabajando mucho en tratamiento terciario, lo que mejorará muchísimo la calidad de las aguas, algo que es muy importante», añadió.

El director general de Recursos Hídrics destacó también que esta depuradora cuenta con un sistema nuevo que incorpora sistemas de emergencia en caso de avería. «En caso de un fallo se pondría en funcionamiento el módulo de emergencia y no se provocarían daños al mar», remarcó Rodríguez, que recordó qeu habitualmente estos vertidos no tratados iban a parar al mar cuando había averías.

Las obras, que han tenido una duración de un año y fueron adjudicadas a Copasa, han incluido un tratamiento físico y químico de emergencia, la eliminación de nitrógeno y fósforo y la construcción de una nueva estación de bombeo para evacuar los caudales depurados al emisario submarino.

El conseller Vicens recordó que Balears es una comunidad puntera a nivel de saneamiento, lo que resulta de vital importancia en un lugar turístico.

El Gobierno central invertirá 65 millones en Eivissa

El conseller explicó que hace poco visitaron Madrid para intentar impulsar todas las obras que tiene previstas el gobierno central en materia de aguas. Según Vicens, se calcula que Eivissa recibirá inversiones por valor de 65 millones entre interconexión de desaladoras, saneamiento y la depuradora de Vila. Respecto a esta última obra, que se situará en sa Coma, indicó que se está redactando el anteproyecto.

Además, en 2010 el Govern balear invertirá 6,7 millones en depuración. Una de las obras más importantes es el emisario de Cala Tarida, por 2,1 millones y que está en tramitación.

CAPACIDAD. La depuradora puede tratar 5.651 metros cúbicos diarios y permite atender las aguas residuales de 25.115 habitantes.

OBSOLETA. Las obras de esta depuradora eran muy urgentes porque estaba obsoleta y además recibe las aguas sucias de las fosas sépticas.