Vista de la promoción obsoleta que abrirá espacios en el centro de Vila. | G.G.

El Ayuntamiento de Eivissa espera conseguir la licencia para demoler las viviendas de Santa Margarita antes del 30 de septiembre, tal y como ha avanzado el teniente de alcalde Santiago Pizarro.

El edil ha informado de que los 13 propietarios de Santa Margarita que hasta la fecha habían rehusado aceptar las condiciones de la expropiación, firmaron este martes la permuta voluntaria de su vivienda por una nueva en el edificio Es Pla de Vila.

Con esta rúbrica, que da validez al acta de ocupación de sus casas, se cumple el último trámite para completar el proceso de expropiación de estos pisos, que se enmarca en el proyecto de rehabilitación urbana Eivissa Centre. Algunos de los propietarios, incluso, entregaron las llaves de sus viviendas. Los que todavía no lo han hecho tienen de plazo hasta el 30 de septiembre.

Desde el Consistorio han aclarado que, pese a que estos vecinos han aceptado el dinero de la expropiación, esto no quita que puedan recurrir ante el Jurado Provincial de Expropiación, en el caso de que no estén de acuerdo con la valoración económica que se ha hecho de su casa. No obstante, desde la empresa mixta Itusa, participada por el Ayuntamiento y por la promotora Bruesa. S.A., consideran que la valoración económica que se ha hecho «es absolutamente justa».

En este sentido, el ayuntamiento pagará 83.941 euros por un piso de 27,38 metros cuadrados y 146.420 euros por aquellos cuya superficie sea de 47,7 metros cuadrados.

Efectuado este trámite, la empresa mixta Itusa puede ya inscribir estas viviendas a su nombre, tras lo cual sólo falta la licencia para proceder a su demolición, cuyo proyecto ya está redactado.

El Consistorio ha hecho hincapié en que estos inmuebles «están en muy mal estado», cuestión por la que quieren comenzar el derribo «lo antes posible», más aún cuando entienden que, tras quedarse vacíos, su situación «empeorará todavía más».

Una vez efectuado el derribo, en el solar se construirán viviendas de carácter privado y venta libre, cuyos beneficios se destinarán a «pagar el edificio de es Pla de Vila y el resto de proyectos de Eivissa Centre», ha resaltado Pizarro.