Imagen de archivo del edificio de las viviendas de Santa Margarita, en Vila.

El Ayuntamiento de Vila finalizó el pasado lunes el proceso de expropiación de las viviendas de Santa Margarita, según anunció ayer el portavoz del equipo de gobierno, Santiago Pizarro. Este proceso ha acabado con la permuta económica de los últimos 13 habitantes de las viviendas que aún residen en el edificio de protección oficial y que rechazaron obtener una nueva casa en el edificio Juan XXIII.

A partir de aquí, y según indicó Pizarro, los últimos propietarios tienen de plazo un mes para abandonar el edificio de Santa Margarita, es decir hasta el próximo 30 de septiembre. Mientras, la empresa mixta Itusa ya puede inscribir estas viviendas como bienes propios y obtener la licencia de demolición del edificio: «Los siguientes pasos son derribar el edificio de Santa Margarita y continuar con el proyecto de Eivissa Centre», indicó Pizarro.

Asimismo, apuntó que el proyecto de demolición ya está redactado con lo que confía que a lo largo de este mes se obtenga la licencia para derribar el edificio «y evitar así que entre gente a las viviendas, que es lo que siempre pasa en estos casos», puntualizó.

Venta del solar

Una vez derribada la construcción, el Ayuntamiento de Vila espera poder vender el solar para hacer frente a las deudas que tiene Itusa y correspondientes a la construcción del edificio Juan XXIII. Y es que, según explicó Pizarro, de las 121 viviendas construidas se han entregado 76 para los habitantes de Santa Margarita: «Con la venta del resto de pisos (45) no se puede hacer frente a todas las deudas, pero con la venta del solar sí se puede».

Asimismo, el portavoz del equipo de gobierno recalcó que los últimos 13 propietarios aceptaron las cantidades económicas propuestas, «aunque esto no significa que si no están de acuerdo puedan recurrir ante el Jurado Provincial de Expropiaciones». A pesar de esto, Pizarro recalcó que desde el Consistorio consideran las cantidades «totalmente justas». Y es que, según detalló, el metro cuadrado cuenta con un valor medio que supera los 3.000 euros. Así, los propietarios de una vivienda en el edificio de Santa Margarita de poco más de 27 metros cuadrados han obtenido una permuta económica de 83.941 euros, mientras que por una de 47,7 metros cuadrados, la cifra asciende a 146.420 euros, según precisó Santiago Pizarro.

El proyecto Eivissa Centre sigue su camino

El portavoz del equipo de gobierno municipal, Santiago Pizarro, explicó ayer la situación del resto de actuaciones que se incluyen en el proyecto Eivissa Centre. De esta manera, indicó que en caso de obtener beneficios con la venta del solar de Santa Margarita, una vez saldadas las deudas de la empresa mixta, se destinarán a la construcción del auditorio municipal, previsto en el proyecto Eivissa Centre. «Todo dependerá de los temas financieros», apostilló.

Asimismo, Pizarro también explicó que el consistorio ya cuenta con un estudio geotécnico para la construcción del aparcamiento subterráneo que ocupará toda la superficie de la unidad de actuación. Por último, Vila continúa con conversaciones con el Ministerio de Justicia para entregar el solar de sa Graduada. Ahora, el debate se centra si el solar destinado a los nuevos juzgados se debe entregar con el edificio de sa Graduada tal y como se encuentra actualmente o si es necesario el derribo de una parte de él.