Una mujer pasea por la zona de sa Punta de sa Gavina.

El temporal de viento y fuerte oleaje que desde hace dos días azota las Pitiüses dejó ayer a Formentera casi incomunicada con Eivissa ya que las barcas del servicio diario de transporte sólo realizaron un trayecto de ida y vuelta por la mañana y otro por la tarde.
Si el lunes se suspendieron muchos viajes, ayer sólo el rápido 'Formentera Jet', de la naviera Trasmapi, realizó dos viajes de ida y vuelta entre la Savina y Vila. El primero de ellos fue a las ocho y media de la mañana con dirección a Eivissa para regresar a las nueve y media y no volvió a zarpar hasta las cuatro de la tarde para retornar a su puerto base a las cinco de la tarde.
La situación de la mar era sumamente complicada por lo que Baleària suspendió los viajes del fast ferry 'Nixe', buque mixto de pasaje y carga, así como del 'Arlequín Rojo', sólo de mercancías, ya que las condiciones de navegación desaconsejaban los trayectos ya que en la zona de es Freus se habían creado rompientes con olas que estaban entre los tres y cuatro metros debido a rachas de viento que habían llegado hasta los 80km/h. La naviera local Mediterránea Pitiusa suspendió todos sus trayectos quedando las embarcaciones amarradas en la Savina durante todo el día.
Las previsiones meteorológicas indicaban que por la noche el viento amainaría, la alerta pasaría de naranja a amarilla y a lo largo de hoy miércoles se irá recuperando la normalidad en las conexiones entre Formentera y Eivissa.
Durante toda la jornada de ayer fueron muchas las personas que se acercaron a las zonas azotadas por el temporal destacando la espectacularidad en el tramo comprendido entre Punta Rasa, Cala Saona y Punta Gavina, así como entre éste último punto y Punta Pedrera, donde las olas al chocar con los acantilados levantaban inmensas columnas de agua, hasta el punto de que desde la Savina se veían los surtidores.