Imagen de la Casa Marcet de Formentera, obra de Broner. | MARIA CASTELLO (MARIANO CASTELLO

«Hay edificios que tienen valor desde el momento en que se construyen»; son edificios modernos y contemporáneos y, según el Col·legi Oficial d'Arquitectes de Balears, deberían estar protegidos e incluirse en los catálogos municipales. Por ello, han elaborado un primer listado de 42 edificaciones de las Islas para las que pedirán protección, once de ellas en las Pitiüses.
El presidente del COAIB, Luis Corral, explicó que algunos «catálogos de protección se detuvieron en los años cincuenta». Si a esto añadimos que «en la arquitectura contemporánea no hay conciencia social de que cuando un edificio tiene valor debe estar protegido», encontramos una larga lista de construcciones, públicas y privadas, en peligro. «Hay que aprender a mirar la arquitectura. Hay muchos edificios que no se incluyen porque tiene pocos años y es un error», explican Corral y Martín Lucena, responsable de Cultura del COAIB.
En este primer listado, que de inmediato harán llegar a los diferentes ayuntamientos, se han incluido 25 edificios de Mallorca; 10 de Eivissa, 6 de Menorca y uno de Formentera, que corresponden a diferentes generaciones de arquitectos, algunos de las Islas, como Pere Garau, Martínez Lapeña, Elías Torres o Antoni Alomar, y otros de prestigio internacional, como Utzon.

Medidas
¿A qué afectaría esta protección? Según Luis Corral, «dependerá de lo que indique cada ficha del catálogo. En algunos casos, se refiere a la volumetría; en otros, a las fachadas o los ornamentos, por ejemplo». Esta petición de los arquitectos también afecta a intervenciones contemporáneas sobre edificios antiguos, como las escaleras de Elías Torres para el Castillo de Dalt Vila.
El «boom inmobiliario» de los últimos años no ha impedido que entre los proyectos del sector privado se hayan levantado obras de calidad, ha dicho Corral, que ha añadido que la solicitud de protección hecha pública ayer es una «llamada» a las instituciones públicas, pero también al conjunto de la sociedad.
En este sentido, el presidente del COAIB ha lamentado que «llama la atención» que la actual legislación está en ocasiones más pendiente, por ejemplo, de los pararayos y no de proteger y salvar un edificio de gran calidad arquitectónica.