Jaume Ferrer, junto a los componentes del nuevo Ejecutivo insular. | Guillermo Romaní

El presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, compareció ayer en su primera rueda de prensa tras reeditar presidencia, acompañado por los cinco consellers electos de su partido, GxF, un equipo con pocos cambios: la ausencia de Pep Mayans, que había sido titular de Turisme i Mobilitat y las entradas de Sandra Ferrer y Sergio Jiménez.
«Iniciamos este mandato con un equipo de gobierno que cuenta con una mayoría simple para gobernar el Consell, un equipo de gobierno -resaltó Jaume Ferrer- joven, preparado y con ilusión de dar continuidad a la tarea realizada en los últimos cuatro años y con muchas ganas de poder llevar adelante todos los proyectos que ya están iniciados, que en gran medida resolverán problemas existentes y con la esperanza de que, en materia de financiación, se reciba todo el dinero necesario para seguir avanzando».
En consecuencia, Ferrer indicó que se había adoptado la medida de un reparto de áreas y tareas de responsabilidad entre los consellers de GxF para que la primera institución de la isla siga funcionando.

Indefinición sobre el pacto
Preguntado, si GxF se planteaba seriamente la posibilidad de ceder un año la presidencia del Consell al PSOE, Ferrer señaló que «el pacto no es una cuestión de equipo de Gobierno sino de partido y esta noche [por ayer] GxF celebra una Ejecutiva a partir de la que se podrán marcar las diferentes líneas que decida el partido. No será Jaume Ferrer ni cualquiera de los consellers que me acompañan los que decidan qué pacto se ha de hacer». «Hay aspectos que están muy avanzados, pero hay otras cosas que nos separan y el partido debe decidir qué quiere hacer por el bien de la isla y con la intención de tener un gobierno estable», añadió.
Ferrer subrayó que «los formenterenses no entenderían que GxF y PSOE, fuerzas progresistas, no sean capaces de llegar a un acuerdo, que es lo que se ha votado mayoritariamente, aunque con distintos resultados en el caso de GxF y del PSOE».
«Desde el día de las elecciones, GxF ha mantenido una misma línea sobre de los posibles pactos de gobierno. Dijimos que las explicaciones se darán cuando se haya llegado a un pacto o cuando éste haya sido imposible; nuestra intención es firmar un pacto con los socialistas de Formentera, pero si es imposible estamos dispuestos a gobernar en mayoría simple y abiertos a alcanzar pactos puntuales con los restantes partidos», declaró.
Ferrer dijo que se retomarán las negociaciones «a fin de llegar a un acuerdo, que no veo muy lejano». «Pero como no está firmado no quiero asegurar que esté hecho», dijo, y señaló que jueves o viernes confiaba en volverse a reunir con Hilari Ferrer para retomar el diálogo.
El presidente no olvidó mencionar que ha habido por parte de algunos dirigentes socialistas un interés por filtrar información a fin de predisponer a la opinión pública: «Nosotros no hemos dicho nada; ha habido personas que han hecho filtraciones interesadas. Nosotros no hemos hecho ruedas de prensa aunque otros sí lo hayan hecho, y no cometeremos la irresponsabilidad de anunciar acuerdos inexistentes».

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Comunicado socialista
Sobre las 22,00 horas de ayer, el PSOE de Formentera emitió un escueto y poco claro comunicado en el que señalaba que «la tranquilidad y calma, característica propia de la gente de esta tierra, preside nuestro comportamiento. Cada circunstancia tiene su momento y tenemos que respetar los acuerdos en cuanto a forma, contenido y tiempo».
Añadía que «el sábado pasado nuestro grupo votó a favor de la elección como presidente de Jaume Ferrer porque confiamos en su palabra. Los formenterenses siempre hemos cumplido nuestra palabra».

'Baile' de responsabilidades
Ferrer sigue ocupando el área de Seguretat Ciutadana pero una de sus competencias, la relativa a Esports, pasa a manos de Sergio 'Chechu' Jiménez.
Entre los cambios más importantes está el que la vicepresidenta primera, Sònia Cardona, suma a sus responsabilidades en Educació, Cultura, Patrimoni i Personal las de Benestar Social.
Asimismo, el segundo vicepresidente, Bartomeu Escandell ve incrementadas sus responsabilidades en Hisenda, Obres, Urbanisme i Territori con las áreas de Presidència e Infraestructures.
Silvia Tur repite en Medi Ambient, Industria i Energia y sigue con la responsabilidad de Seguretat a les Platges, Noves Tecnologíes y Telecomunicacions. Sandra Ferrer ocupa el hueco dejado por Pep Mayans y es la nueva responsable de Turisme, Comerç i Mobilitat.
Por último Chechu Jiménez, tendrá a su cargo las áreas de Agricultura, Pesca, Ramadería i Caça, además de asumir Esports, Joventut y Participació Ciutadana.

Segundo primer día como presidente
A las ocho de la mañana estaban convocados en su despacho todos los consellers de GxF para comenzar a trabajar, y eso pasaba, evidentemente, por el reparto de las tareas. Ferrer estaba por segunda vez viviendo su primer día, con la diferencia de que en 2007 lo vivió como alcalde, mientras que ayer llegó como presidente.
El trabajo, el mismo de la semana anterior, aunque a su lado había caras nuevas y alguna que otra ausencia. Y a diferencia de hace cuatro años, cuando los pactos eran anteriores a la investidura, ayer la situación era otra muy distinta.
Lo primero, reflexión interna, acuartelados en el despacho del alcalde-presidente, reparto de tareas, teléfonos en silencio y marcando las líneas de actuación inmediata; de vez en cuando algún conseller salía a la plaza a respirar, fumar un cigarro o llamar por teléfono.
Hacia las once y cuarto, poco más o menos, el propio presidente mandaba un sms a los medios de comunicación citándolos para las doce del mediodía, la «Hora del Àngelus», en la sala de pleno.
En la rueda de prensa, la primera de la nueva legislatura, Ferrer enumeró consellers y competencias y luego se sometió al bombardeo de preguntas. Luego siguió con reuniones, papeleos y no salió del Consell hasta prácticamente las tres, cuando se fue a comer a casa con la familia. Pasadas las seis de la tarde hizo un rato de deporte, se fue a correr y pensar; posteriormente tenía la Ejecutiva de GxF y luego, a descansar porque hoy por la mañana estará en el Parlament.