J. M. AlonsoEivissa20/03/12 0:00
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El diputado Enrique Fajarnés y el senador José Sala comparecieron ayer en conferencia de prensa para valorar algunas de las medidas adoptadas por el Gobierno en relación con las Pitiüses.
Fajarnés anunció que el 17 de abril por la tarde mantendrá una reunión con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, para «ver cómo van los trabajos de la modificación [de la Ley de Costas] y ver exactamente cuáles son los tiempos para que del deslinde [de Formentera] justo que se reclama desde hace mucho tiempo sea una realidad». Al respecto, Sala dijo que la modificación de esta ley evitará que corran peligro «los chiringuitos y las casetas varadero de carácter tradicional».
Sala, que criticó la convocatoria de los sindicatos para la huelga general, «ya que ni siquiera se habrán cumplido ni cien días de gobierno del PP», señaló también que desde el Ministerio de Justicia se ha solicitado un informe sobre el estado de los juzgados en las Pitiüses y sobre el punto concreto en que encuentra el proyecto Eivissa Centre.


Petróleo
Acerca de las prospecciones petrolíferas emprendidas en aguas canarias, ambos dijeron que este asunto no se puede comparar con la situación en el corredor de Eivissa. «Hay un compromiso con Balears y la Comunidad Valenciana: se hará lo que cada una de las comunidades quiera que se haga», aseguró Fajarnés. Sobre el parador de Eivissa, el diputado dijo que es «una prioridad para el ministro José Manuel Soria, para Rajoy y para Bauzá» y también que el proyecto «no corre peligro». Añadió que espera que en 2014 sea una realidad y que no se cierra la puerta a una gestión público-privada.
Ambos señalaron que el Gobierno apoya las inversiones en zonas turísticas maduras, lo que beneficiaría a áreas como Sant Antoni y Platja d'en Bossa. Por otro lado, ambos se mostraron favorables a adoptar medidas para mejorar la conectividad aérea entre Eivissa y la Península, como ya ha ocurrido en Menorca.
Los dos políticos también destacaron la importancia de que recalen en la Isla el mayor número de cruceros posible. «Las cajas de los comerciantes se triplican con los cruceros», dijo Fajarnés.