Imagen de archivo de la zona de ses Variades en la que se congregan cientos de personas para la puesta de sol. | PAULA PALOMARES

Consumir bebidas en la puesta de sol de ses Variades será próximamente hacer botellón, y por lo tanto, infringir la Ordenanza de Convivencia de Sant Antoni. Este mensaje debió quedar muy claro a quienes acudieron al famoso atardecer de la bahía de Portmany el pasado sábado y se encontraron con una operación policial contra lo que el Ayuntamiento de la Villa de Portmany calificó como «botellón masivo en ses Variades».

Según el Consistorio, el operativo fue informativo «por ser la primera acción conjunta con el fin de informar de las sanciones y alertar de la modificación de la ordenanza, que está pendiente de aprobación definitiva a final de junio».

La Policía Local de Sant Antoni y la Guardia Civil llevaron a cabo esta operación con un dispositivo duró toda la tarde, desde las 18,00 hasta las 21,00 horas, y que contó con la participación de cuatro agentes de la Guardia Civil y diez de la Policía Local, dos de ellos de paisano. «Ésta es una de las primera operaciones conjuntas que llevarán a cabo ambos cuerpos policiales en el marco de una campaña para combatir el botellón», anunció Sant Antoni.

En este sentido, desde el Consistorio recordaron que la modificación de la Ordenanza de Convivencia introduce, entre otros cambios, «la protección a menores y el botellón».

La normativa establece nuevas reglas para la protección de los menores, en particular contra el alcoholismo, venta y suministro, y también detalla aún más el concepto de práctica de botellón, que entiende como el consumo de bebidas alcohólicas en la vía publica por un grupo de personas y sin la correspondiente autorización, cuando como resultado de esta concentración se deteriora la tranquilidad del entorno o provoca en él situaciones de insalubridad.

Sin embargo, la ordenanza no se limita al consumo de bebidas alcohólicas, ya que también considera botellón y, por lo tanto, prohibe «la ingesta de bebidas no alcohólicas» si se dan las condiciones de ingesta masiva dentro reuniones o concentraciones que perturben la tranquilidad ciudadana.

Esta práctica conllevará la sanción mínima de