Imagen de una pancarta en la que se puede ver el barco de la sanidad pública hundiéndose.

Carteles como ‘los recortes en educación crean ignorancia; los recortes en salud matan’ en el centro de salud de Vila o ‘Recortes en sanidad: a partir de las 17,30 se cerrará el centro de salud y los viernes a las 15,00 horas. ¿está usted de acuerdo?’ en el centro de es Viver informaban ayer a los ciudadanos de la nueva medida de ajuste económico planteada por el Govern que prevé el cierre de los centros de salud por la tarde, concretamente, a partir de las 17,30 horas de lunes a jueves, y a partir de las 15,00 horas los viernes (en ambos casos, el horario de atención empezará a las ocho de la mañana). Las atenciones de urgencias se mantendrán en los centros de salud de Vila, Santa Eulària, Sant Antoni y el hospital Can Misses.

«Nosotros siempre hemos venido al médico por la tarde porque por la mañana siempre trabajamos», apuntó María del Carmen Mero, una vecina de es Viver. El personal del ambulatorio de este barrio explicaba ayer con paciencia el nuevo horario de los centros de salud. Frente a ellos, ciudadanos escépticos que no asimilaban el nuevo horario mientras otros recibían con indignación la nueva medida. «Se están tomando decisiones tremendamente drásticas que no es que sólo toquen el bolsillo, sino lo que es peor, que afectarán a la salud, sobre todo de los niños», apuntó Clevere Ramón, otro vecino de es Viver. «No es normal que cierren los ambulatorios por la tarde. Tengo un niño con bronquitis asmática y necesitamos un centro de salud cerca porque cuando le dan crisis hay que actuar rápido porque se le pueden cerrar los pulmones», explicó Sonia Casas, también vecina de este barrio. Los usuarios del centro de salud de Vila tampoco vieron con buenos ojos esta nueva medida: «No me parece una medida acertada. ¿Y quienes no pueden ir al médico por la mañana qué harán?», se preguntaba Jaime Parrot.

Entre las posibles consecuencias que destaca el sindicato de enfermería Satse se encuentra el «previsible» colapso de las urgencias al eliminarse las consultas vespertinas y la reducción del tiempo de asistencia de los pacientes en las consultas matutinas. «Tiene toda la pinta que se colapsarán las Urgencias, porque, al no tener médico de cabecera por la tarde, acudirán a ellas. Con esta nueva programación, además, hará que se puedan dedicar menos tiempo a los pacientes dado que muchos de ellos venían por la tarde y, como ahora no podrán hacerlo, irán por la mañana», explicó Carmen Ortiz, delegada del sindicato Satse. En este sentido recalcó que esta medida supone un «deterioro muy grave» para la salud de los pacientes, pues se perderá el seguimiento de algunos usuarios. «Los que no puedan venir por la mañana por cuestiones de trabajo acudirán a Urgencias y perderán el seguimiento de su enfermedad», precisó Ortiz.