El conseller d’Agricultura, Medi Ambient i Territori, Biel Company, recordó ayer que aunque en los presupuestos del Estado no se contemple ninguna partida para la nueva depuradora de Vila ellos tienen el compromiso del ministro Miguel Arias Cañete de que esta obra se tiene que sacar a contratación en 2013. De hecho, recordó que el acuerdo al que llegaron en mayo fue que durante este año se haría la tramitación medioambiental para en 2013 poder sacar la obra ya a concurso, además de parte de la red de Vila. Se trata de un proyecto presupuestado en 39 millones.
El conseller recalca que aunque esto lo hablaran ya hace meses está «pactado» y se debe mantener pese a las «dificultades presupuestarias». Ahora el problema es que ha habido un cambio y hay una nueva directora general del Agua. El conseller estuvo reunido con ella hace dos semanas para repasar los acuerdos y quedaron para una próxima cita con el fin de ver cuáles son las periodificaciones de las obras. «El Ministerio se comprometió a hacerlo y no nos ha dicho que no», añadió Company, que recordó que esta infraestructura está dentro del Plan nacional de calidad de las aguas 2007-2015.
Emisario de Talamanca
El conseller también se reunió con la alcaldesa de Vila, Marienna Sánchez-Jáuregui, con la que habló de la necesidad de construir un nuevo emisario en Talamanca, una propuesta que se negocia con el Gobierno para que se haga cargo. Según destacaron desde Medi Ambient, esta infraestructura está «anticuada y deteriorada» y hace unas semanas Abaqua la tuvo que reparar urgentemente por una avería causada accidentalmente por un ancla, actuación que requirió una inversión de 7.440 euros por parte del Govern. También hablaron de las condiciones del nuevo convenio que el Ayuntamiento tiene que firmar con el Abaqua, que será temporal hasta que entre en funcionamiento la futura interconexión de agua potable de la Isla, un proyecto que también iene que hacer el Gobierno central.
Precisamente tanto este proyecto como el de la desaladora de Santa Eulària están ahora mismo parados. Company recordó que la desaladora no está conectada, lo que les genera «un problema importante». Asimismo, se está pendiente de licitar la interconexión, que costará 3 millones, y que está en pleno proceso burocrático. El conseller aseguró que está negociando con Madrid porque en las obras de la desaladora de Santa Eulària hubo un desfase presupuestario «importante» que sobrepasó los 10 millones, por lo que esta obra está terminada pero no recepcionada. «Si lo asumimos nosotros tendríamos que subir la tarifa del agua a todos los ibicencos», indicó Company, que está en negociaciones para que Madrid ponga el dinero. El conseller descartó que esto se pueda pagar por todos los baleares. «No repercutiremos tampoco en Eivissa las tres desaladoras que hay en Palma», añadió Company, que aseguró que una planta así cuesta 3 millones anuales, tanto si funciona como si no.
El conseller se reunió también con la alcaldesa de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez, quien le manifestó la necesidad de remodelar la estación de bombeo de la calle Londres, algo que Company reconoció y se mostró dispuesto a estudiar.
Gutiérrez también le pidió que incluya en la nueva ley urbanística (ley 7/2012) una norma que les permita regular el suelo rústico directamente por el Plan Territorial Insular (PTI). El problema es que la normativa del Ayuntamiento es mucho más restrictiva en suelo rústico que lo que incluye el PTI, algo que han intentado cambiar varias veces sin éxito. Company se comprometió a «valorar la petición».
Con la alcaldesa de Sant Josep, Neus Marí, hablaron de la remodelación de la depuradora de Sant Josep, que recibió el interés general del Consell la semana pasada. Marí también le reclamó que se hagan las obras del emisario de Cala Tarida, que «todavía están pendientes de la autorización del Ministerio de Medio Ambiente».
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