Imagen virtual del establecimiento que se abrirá este verano en s’Argamassa.

«Los invitados pasarán sus días envueltos en champagne interminable y un menú delicioso al tiempo que disfrutan con la música de los DJ’s residentes e invitados». Así se promociona el beach club que la marca estadounidense Nikki tiene previsto abrir este mismo verano en la playa de s’Argamassa, en Santa Eulària.

La apertura de este local contrasta con la moratoria aprobada el pasado 15 de marzo por el Ayuntamiento de Santa Eulària que prohíbe la apertura de nuevos locales de ocio en el municipio contemplados en el artículo 60.2 de la nueva Ley de Turismo 8/102. Si bien esta moratoria, como aseguraban ayer fuentes municipales, «solo prohíbe discotecas y cafés concierto» pero no dice nada de los beach clubes «porque no están regulados». Además, la prohibición sobre cualquier tipo de negocio de ocio solo es extensible a las zonas de Cala Llenya, Roca Llisa y Cap Martinet, pero no al resto del municipio.