Desde el momento en que se apruebe la ley, entrará en vigor la licencia única lo que en la práctica significa que cualquier producto o servicio producido al amparo de cualquier normativa autonómica podrá ser ofertado en cualquier punto del territorio español sin necesidad de trámite adicional. La ley permite al Gobierno suspender las normativas autonómicas que no respeten este precepto.
Las consecuencias
A la espera de conocer con detalle el contenido exacto de la ley, el Govern ya anunció que deberá revisar la normativa relativa al sector comercial y al del juego. De hecho, el Govern ya estaba trabajando en la modificación de la ley de comercio y del juego, pero estos trabajos quedarán de momento en suspenso hasta que el ministro Luis de Guindos informe con detalle a las comunidades autónomas de las consecuencias directas de la nueva ley.
Según las estimaciones del Ministerio, la ley entrará en colisión con unas 6.000 normas diversas de administraciones autonómicas. El Govern tampoco sabe aún cuántas de estas normas corresponden a Balears. Según el comunicado del Ministerio, la aprobación de esta ley supondrá un aumento total del PIBde 1,52 por ciento en un periodo de diez años, lo que supone unos 1.500 millones de euros al año.
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