Los pequeños aventureros se van de acampada

Los niños y niñas de la escuela de verano del colegio L’Urgell de Sant Josep disfrutaron ayer de un intenso día de acampada. Desde primera hora de la mañana, los participantes asistieron a sus clases con normalidad, pero no fue un día cualquiera, ya que todos esperaban con entusiasmo que llegara la hora de comer, para empezar la gran aventura.
Un total de 64 menores de trece años, cuidados por catorce monitores, fueron todos los participantes en esta tradicional actividad.
Después del almuerzo dieron comienzo los ejercicios de relajación y cuando todos estaban preparados arrancaron los talleres de manualidades. Los niños hicieron broches de animales, pulseras trenzadas de colores, figuras con fruta, que después se comieron encantados y la actividad estrella, los monitores los maquillaron como ellos eligieron. María, Elena y Emily esperaban una larga cola para conseguir que les dibujaran una mariposa en la cara. Josep, en cambio, se maquilló al estilo de Batman.
Elvis y Johan, ambos con cuatro años, no pararon de jugar en toda la tarde, y no querían que llegara la hora de marcharse a casa.
Cuando se acabaron los talleres todos merendaron en el patio del colegio y la aventura terminó para los más pequeños.
Sin embargo, los grupos «Tutankamon», nacidos en el 2007, «Futbolistes», nacidos en 2005 y 2006, y los «Supercracks», nacidos entre el 2001 y el año 2004, pasaron toda la noche en el gimnasio. Las monitoras prepararon con empeño una gincana con actividades diferentes para todos, relacionadas con el sistema solar. Los niños actuaron como habitantes de la luna y, con la ayuda de cada uno de los planetas, consiguieron volver a su órbita después de haber superado todas las pruebas.
Cada uno de los aventureros tuvo que llevar su almuerzo y tupper para la comida, todos menos los miembros del comedor. Pero la merienda, cena y desayuno de hoy, han corrido a cargo de la escuela de verano. También tuvieron que portar sus sacos de dormir, linternas y repelente de mosquitos, todo lo necesario para pasar una gran noche de acampada.