José Ramón Bauzá durante la sesión plenaria del Parlament del pasado martes. g Foto: TERESA AYUGA | Teresa Ayuga

El president del Govern afirmó sin tapujos el jueves ante un grupo de empresarios que el Consell de Mallorca debe reducirse a la mínima expresión y añadió que, si de él dependiera, lo haría esa misma tarde. No es la primera vez que el president insinúa que debería ‘adelgazarse’ la institución insular, pero sí es la primera que lo hace con tanta contundencia.

Fue en la jornada de debate organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) que se celebró el pasado jueves con la colaboración de Deloitte. El president contestó a una quincena de preguntas formuladas por los empresarios, entre ellas una relativa al papel de los consells.

Menos competencias

Bauzá aseguró que las circunstancias geográficas aconsejan que los consells de Menorca y Eivissa sigan recibiendo más competencias, pero consideró que el de Mallorca «debe reducirse a la mínima expresión». Para Bauzá, su papel debe ser el de mero ayudante técnico y jurídico de los ayuntamientos. «Si de mi dependiera , lo haría esta misma tarde», concluyó el president.

La sentencia de Bauzá arrancó aplausos mayoritarios entre los empresarios reunidos, pero también provocó estupefacción entre otros por la claridad con la que el president se refirió al Consell de Mallorca.

Las declaraciones del presidente han causado indignación en el PP de Mallorca. Los miembros del PP consultados consideran una falta de respeto que el president «desprecie» el trabajo que ha estado realizando todos estos años, en unas condiciones económicas muy complicadas propiciadas precisamente por la falta de financiación del Govern.

Fuentes del partido en Mallorca no descartan pedir explicaciones al president en una próxima reunión interna y exigirle que aclare de una vez por todas cuál es su postura sobre la institución. «Nos ha dejado a los pies de los caballos», dijo un alto cargo del partido.

Cautela de Salom

La presidenta de la institución, Maria Salom, se mostró mucho más cauta al respecto. No quiso polemizar con el president pero sí le lanzó un mensaje claro: «El Consell de Mallorca es imprescindible para mantener las esencias de la mallorquinidad».