Arriba la restauradora Laia Fernández trabaja con un azulejo. | (c) Sergio G. Canizares

401.514 euros. Esto es lo que invertirá el Consorci Eivissa Patrimoni de la Humanitat en llevar a cabo tres trabajos en Dalt Vila. El primero consiste en mejorar los accesos al Baluard de Santa Llúcia por el oeste, el segundo en la restauración de la capilla del Santo Cristo en la iglesia de Santo Domingo, y el tercero en la transformación en equipamiento urbano de un solar en ruinas ubicado en el calle de la Santa Faz.

Sin duda, el más importante de los trabajos es el que pretende sanear y detener el deterioro existente en esta pequeña capilla de es Convent, de apenas cincuenta metros cuadrados y construida entre finales del siglo XVIII y principios del XIX.

Según explicó el arquitecto encargado de los trabajos, Toni Marí, la capilla ha sufrido daños a lo largo de su historia por el alto grado de humedad del edificio, situado en la parte alta de Dalt Vila, entre el calle del General Balanzat, la ronda de Fratín y el Ayuntamiento de Vila, por un bombardeo que en 1936 dañó a imágenes y lienzos, y finalmente por un incendio que en 1971 afectó a la iglesia y a la capilla.

Así, con un presupuesto de 118.497 euros y un plazo de ejecución previsto de seis meses desde que comenzaran los trabajos a principios de octubre, los expertos sanearán completamente los muros y el pavimento, que estaba totalmente abombado, pintarán las paredes, renovarán la carpintería, pondrán una iluminación nueva, e instalarán un detector de humos y un sensor de alarma.

En este sentido, Toni Marí, explicó que el proceso más laborioso es el que corresponde al alicatado original, datado a principios del siglo XX. Tal y como explicaron los técnicos restauradores encargados de los trabajos, Laia Fernández y Jordi Riera, lo primero que se ha hecho es quitar los azulejos con motivos florales del zócalo uno a uno para limpiarlos, primero por detrás y después por delante, y arreglar los posibles desperfectos que presenten. Posteriormente, se clasifican todos, numerándolos, fotografiándolos y documentándolos, y tras ello se trasladan a una zona donde se les quita la humedad que sufren y que es uno de sus mayores enemigos. Finalmente, una vez arregladas, el mismo equipo restaurador volverá a colocar cada una en su sitio original respetando cinco composiciones figurativas más grandes que recogen temas de los Ministerios Dolorosos del Santo Rosario.

Trabajos anteriores

Éstos no serán los primeros trabajos que se llevarán a cabo en la Capilla del Santo Cristo. Según Toni Marí, en 2003 ya se llevaron a cabo unas obras de drenaje y pendiente, y en 2011 se realizó una actuación de urgencia con el fin de recuperar las condiciones de seguridad de la capilla, ante el hundimiento de la cubierta y la sobrecubierta de la estancia oeste de la misma.