De los 12.563 beneficiarios de la renta, cerca de la mitad reciben el complemento de la pensión.

La renta social garantizada de Baleares, una prestación económica dirigida a personas en situación de vulnerabilidad, cerró 2019 con un total de 12.563 beneficiarios (8.460 titulares), a los que en el mes de diciembre se han destinado 1,95 millones de euros.

Según informó ayer la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes del Govern, a lo largo de 2019 la cifra de beneficiarios ha aumentado en 1.384 personas.

La Renta Social Garantizada es una prestación periódica dirigida a situaciones de vulnerabilidad económica y a la cobertura de gastos básicos.

En 2019, el importe de la prestación básica mensual de la Renta Social Garantizada familiar es de 457,31 euros, que se incrementa según el número de miembros que conforman el núcleo familiar hasta un máximo de 1.312,50 euros. Actualmente, la media mensual que reciben las familias se sitúa en los 568 euros.

El sistema de la Renta Social Garantizada incluye un complemento específico que permite que quienes perciben pensiones no contributivas, ya sea por invalidez o por jubilación, puedan llegar a percibir un importe mensual de 457 euros, sumando su pensión más el complemento. De los 12.563 beneficiarios de la renta, cerca de la mitad (6.091) son beneficiarios del complemento de la pensión.

En cuanto al estado de las solicitudes a día 31 de diciembre de 2019, se han presentado 20.189; se han aprobado 8.460 (el 41,9 por ciento), denegado 8.391 (41,56 por ciento) y suspendido 1.730 (8,57 por ciento), lo que supone que el 92 por ciento de las solicitudes presentadas ha sido tramitadas.

El resto, 1.608 (7,96 por ciento) se encuentran en trámite de resolución, o son bajas voluntarias o duplicidades. Cabe puntualizar que durante diciembre se estaban concediendo solicitudes de prestaciones registradas dentro del mes de noviembre.

Perfil feminizado
La Renta social garantizada presenta un perfil claramente feminizado, con 62,16 por ciento del total de mujeres titulares. El tramo de edad de más de 65 años, representa el gran grueso de los titulares, llegando a suponer el 46,28 por ciento del total. Esto se explica en que un hay alto porcentaje de los titulares que son perceptores de pensiones no contributivas de baja cuantía y que complementan su pensión.

Por otro lado, de las 8.460 personas titulares a día de hoy, 7.475 son de nacionalidad española, correspondiente en gran parte a pensiones no contributivas, de personas mayores de 65 años y que no han cotizado lo suficiente o personas con alguna discapacidad igual o superior al 65 por ciento.

En cuanto a las modalidades de las prestaciones registradas en fecha de diciembre de 2019, el mayor volumen corresponde al complemento de la pensión, con el 72 por ciento de las personas titulares, mientras que el 28 por ciento restante corresponde a familias.

Por islas, el porcentaje más alto recae en Mallorca, con el 85,7 por ciento del total de personas titulares, que en términos absolutos suponen, 7.250 titulares. Le sigue la isla de Ibiza, con el 8,25 por ciento; después Menorca, con el 5,61 por ciento y Formentera con el 0,44 por ciento.

Por municipios, en Mallorca la mayoría son de Palma y municipios de más de 25.000 habitantes (Inca, Manacor y Llucmajor). En Menorca, la mayoría son de Mahón y Ciutadella; y en Ibiza, también es en la capital donde se concentra el mayor número de titulares.

Incremento

Esta ayuda se puso en marcha en abril de 2016 y desde entonces el número de beneficiarios ha ido aumentando. Por lo tanto, también lo ha hecho el gasto, que supera los 50 millones de euros.

Aunque la Renta Social Garantizada entró en vigor en abril de 2016, fue en enero de 2017 cuando registró un fuerte incremento, con la ampliación de la cobertura a todos los núcleos familiares formados por dos o más personas, con ingresos inferiores a los límites establecidos anualmente, y la aprobación del complemento específico para personas perceptoras de pensiones no contributivas.

En enero de 2018 se amplió el perfil de personas que viven solas mayores de 45 años y con ingresos escasos.