La terraza de un bar en Ibiza durante la fase 2. | DANIEL ESPINOSA

«Es una pequeña decepción, pero había posibilidades de que esto pudiera pasar». Son palabras del presidente del Consell d’Eivissa Vicent Marí tras la negativa a Ibiza del cambio de fase. Marí quiso ser cauto y aseguró: «Esperar una semana más siempre es una cuestión de prudencia y no pasará nada. Hay que seguir haciendo las cosas bien». En esa misma línea señaló: «Yo creo que Ibiza está haciendo una buena desescalada y creo que se merecía el paso a la fase 3, pero bueno en estos casos la prudencia siempre es razonable». El presidente entiende que la negativa al cambio de fase puede venir por algunos repuntes que se están dando por la geografía española. «Como ha habido algún rebrote, puede que las autoridades sanitarias pensaran que un exceso de confianza podría salir mal. Por lo tanto, estaremos una semana más en la fase 2 y luego pasaremos de fase», razonó Marí. Por su parte, los hoteleros, a través de su presidenta Ana Gordillo, se mostraron en una línea similar. Aunque reconocieron que para sus negocios apenas cambia nada, sí que era una pequeña decepción. «En la práctica, para nosotros cambiar de fase no nos afectaba demasiado, pero sí es verdad que es una decepción porque creo que se están haciendo las cosas bien en la isla y podía haber sido un premio para llegar antes al final de la desescalada», señaló Gordillo. La presidenta de la Fehif también pidió «prudencia» porque es «hora de hacer las cosas como tocan». Por último, Gordillo señaló que no tenía nuevas noticias sobre el proyecto piloto del turismo que planea el Govern.