Imagen ayer domingo de Platges de Comte. | Arguiñe Escandón

Llenas, pero con distanciamiento entre los distintos grupos, las playas de Ibiza no registraron incidentes este domingo, como sí pasó el pasado sábado y en fines de semana anteriores.

Los ibicencos y los turistas actuaron conforme a la normativa instaurada por la situación sanitaria o, al menos, no hubo constancia de ninguna actuación policial. Las medidas establecidas por el Govern balear indican que se debe respetar una distancia de seguridad de al menos 1,5 metros entre usuarios o grupos como máximo de 25 personas.

Noticias relacionadas

Las autoridades locales se mantienen atentas al aforo de las playas de su término municipal, cabe recordar que la Policía Local de Sant Antoni desalojó el viernes y el sábado la playa de cala Gracioneta tras superar el aforo máximo permitido.

El Ayuntamiento de Sant Josep informó de que entre finales de julio y principios de agosto pondrá en marcha una prueba piloto para controlar los aforos en las playas de Cala Bassa y Comte con el objetivo de evitar aglomeraciones. El sistema de control se hará mediante nueve cámaras que se instalarán a ocho metros de altura para evitar «actos vandálicos» contra las mismas y que funcionarán con placas solares, con un «prácticamente nulo impacto ambiental», según detalló ayer Josep Guasch, concejal de Playas y Litoral de Sant Josep.

El Consell d’Eivissa informó también de que dentro del proyecto Smart Island se ha dado prioridad también a un sistema de control de aforo de playas compuesto por 52 cámaras distribuidas en 34 playas para ofrecer en tiempo real los datos de ocupación. Está previsto que los dispositivos se instales en 2021 y estén listos para la próxima temporada estival.