La escritora zaragozana María del Rosario Romero en la imagen promocional realizada para su primera novela.

María del Rosario Romero nació en Zaragoza en 1977 pero siendo bien pequeña residió en Santa Eulària donde estudió en el CEIP Sant Ciriac. Fueron pocos años pero la isla le caló tan hondo que todos los veranos y siempre que puede regresa para pasar unos días e, incluso, no descarta poder venir a vivir cuando sus dos hijos sean un poco más mayores. Una conexión muy especial pero que desde hace unos meses se ha convertido en mucho más profunda tras la publicación de su primera novela, Al infierno, ambientada en las islas de Ibiza y Formentera.

Según explicó ayer en conversación telefónica a Periódico de Ibiza y Formentera esta licenciada en Administración y Dirección de empresas que ha trabajado en Adidas y en Keensoft-UST y actualmente en Accenture como Project Manager, se trata de una novela que ella misma se ha auto editado, compuesta por 166 páginas que ha escrito durante el último año y medio aunque su puesta en marcha y preparación le ha llevado casi cuatro.

En esta novela, que ya se puede comprar a través de las principales plataformas de Internet y en algunas librerías, tanto en formato físico como en formato digital, se cuenta una historia de intriga que atrapa desde el primer momento gracias a una serie de giros inesperados y personajes llenos de carisma.

Según aseguró Romero, todo comienza con una muerte en el Faro de la Mola de la isla de Formentera cuyo cuerpo acaba apareciendo posteriormente en una playa de Santa Eulària, a muchos kilómetros de distancia. «Elegí este punto de partida surgió un poco por azar y casualidad, un día en el que estaba visitando y disfrutando con el faro y sus impresionantes vistas y me dio por pensar lo peligroso que podría ser que alguien cayera por allí, bien de forma accidental o bien por un empujón de otra persona de forma completamente intencionada».

Personajes «muy atractivos»

A partir de ese suceso, Romero comenzó a tejer una trama en la que se verán involucrados los dos agentes residentes en la isla que se tienen que encargar de la investigación, la policía de origen argentino Silvina y su compañero Juan, justo cuando ella precisamente está pasando el peor momento de su vida.

Estos dos personajes sobre los que se sustenta buena parte de la historia tienen un gran atractivo, debido en gran medida, a lo cercanos que resultan en todo momento para el lector. De hecho, según explicó María del Rosario Romero están inspirados directamente en dos personas muy cercanos a ella, una amiga suya que trabaja como psicóloga clínica en el caso de ella y un compañero que se desempeña como jefe de proyectos en el caso del compañero que le ayuda en la investigación.

Juntos formarán un interesante tándem con el que conseguirán ir tirando del hilo hasta encontrar una sorprendente relación del fallecido con otros sucesos que ocurrieron en el pasado. Todo ello y sin querer adelantar nada, dando un especial protagonismo a las islas de Ibiza y Formentera que aparecen muy bien reflejadas. «Yo siempre que estoy en la isla viajo con una pequeña libreta donde voy apuntando cosas que se me pasan por la cabeza en el momento o hasta el último detalle del lugar en el que estoy para que al final cuando el lector esté leyendo el libro se sienta como que está allí mismo, siendo lo más fiel posible a todo lo que está sucediendo».

El apunte

«No habrá segunda parte ni una saga»

A pesar de lo atractivos que pueden resultar los personajes principales para el lector y de estar ambientada en Ibiza y Formentera, Mª del Rosario Romero dejó ayer muy claro a Periódico de Ibiza y Formentera que no entra en sus planes hacer ni una segunda parte ni una saga con las aventuras de Silvina y Juan. De hecho parece haberlos aparcado definitivamente para centrarse en su segunda novela en la que abandonará las Pitiusas para viajar hasta el pueblo navarro de Estella. Lo que no cambia es su pasión por las novelas de suspense ya que en este caso será una policía de nombre Anne «la que tendrá que investigar las causas de un suceso muy poco claro ocurrido en el lugar llevándola a descubrir cosas realmente sorprendentes».