una de las visitas realizadas durante el viaje. | Consell de Ibiza

El Consell de Ibiza ha organizado un viaje durante los días 17 y 21 de octubre con una delegación formada por los presidentes y gerentes de las cinco cooperativas agrarias y ganaderas de la isla, técnicos de agricultura del Consell de Ibiza y por director insular de medio Rural y Marino, Joan Marí, en la zona italiana de Emilia Romagna para conocer el trabajo de las sociedades cooperativas que ha propiciado el desarrollo regional de esta zona.

El programa preparado contemplaba la visita a diferentes escenarios cooperativos, tanto cadenas con canales de comercialización cortos (Cantina di Cesena, Central del Latte di Cesena), exportación de productos transformados (Orogel o Granaloro), marcas de calidad protegidas como el parmeggiano (Casseifici 4 Madonne) o el vinagre balsámico de Módena (La Tradizione), grupos de investigación y desarrollo como Ri.Nova o Cooperativas de carácter social como Locanda Smeraldi.

Durante el transcurso de las visitas, uno de los aspectos relevantes que se trató fue la necesidad de apostar hacia la innovación y transformación de los distintos productos así como la importancia de dar a conocer el producto al territorio, con distintos puntos de venta y canales de comercialización cortos, la labor divulgativa en escuelas y centros de formación y la oportunidad de trabajo, que son aspectos imprescindibles a la hora de promover el relevo generacional.

Así, pudieron verse ejemplos de reconversión de instalaciones como la visita a Emil Banca, entidad que facilita el crédito corporativo al sector agrario, y su espacio co-working (MUG) con tecnología avanzada que permite disponer de un espacio de trabajo para emprendedores y un soporte a startups.

La puesta en valor del producto tradicional y la necesidad de trabajar hacia productos de calidad con una marca de protección (caso de la DOP del vinagre de Módena en La Tradizione); reducir desperdicios y plástico, reducir costes generando producción de biogás y biometano para satisfacer las necesidades de la propia explotación (como el grupo Granaloro).

Dado que la región italiana traslada los mismos problemas que acusa al sector agroalimentario en la isla de Ibiza, como son los elevados gastos de suministros como electricidad o combustibles y los elevados costes de las materias primas, se puso sobre la mesa soluciones como las que también ha propuesto el Consell de Ibiza, uniendo Turismo con Agricultura y así reducir costes sumando esfuerzos y dinamizando el producto agrario local.