Imagen de archivo de la pasada legislatura de una protesta de pacientes en Can Misses por la falta de oncólogos.

Faltan médicos y no sólo en Baleares, sino en toda España y Europa, por lo que uno de los principales objetivos de la nueva Conselleria de Salut será hacer de las Islas el destino que todo especialista querría escoger, sobre todo en las categorías de Medicina de Familia, Medicina Interna, Traumatología y Oftalmología.

La titular de la cartera, Manuela García, presentó ayer las líneas estratégicas de esta legislatura frente a los grupos parlamentarios, e incidió en las medidas que quiere tomar de forma inminente para paliar un déficit «que se movería en una horquilla entre 348 y 487», de cara a 2025.

Noticias relacionadas

Son datos extraídos a través de la Inteligencia Artificial, detalló García, quien cifró en 251 las bajas que se esperan sólo por jubilaciones. Entre las medidas de captación ya se han creado puestos de difícil cobertura con seguridad jurídica para aquellas categorías o especialidades con dificultad de provisión. El complemento retributivo para estas plazas que son, de momento los A1 (médicos ) y A2 (enfermeras) de las gerencias de Menorca y Eivissa y Formentera ascenderá a 6.600 euros anuales en el primer caso y 4.800 en el segundo, a partir del 1 de enero de 2024.

Si a día de hoy el plus se paga a 1.933 profesionales de ambas áreas, la consellera se abrió a ampliar las plazas beneficiarias previa negociación con la Mesa Sectorial y aprobación del Consell de Govern. Para determinarlas se tendrá en cuenta «el precio medio de alquiler del área geográfica y población flotante; que no se hayan cubierto en los procesos de selección; la doble o triple insularidad; y la deuda horaria del último año entre los profesionales que están en ese servicio». Otro de los incentivos, ya aprobado por la vía del decreto, pasa por la eliminación del requisito lingüístico del catalán que ha pasado a ser un mérito.

García puso el acento en la necesidad de pedir al Ejecutivo central un aumento del plus de la insularidad, así como de activar el complemento de carrera profesional que lleva congelado desde 2018 y que ha cifrado en 70 millones de euros. Sobre las próximas cuentas sanitarias, su prioridad es «consolidar el presupuesto actual y blindarlo para los próximos ejercicios», dijo. Si bien desde la oposición se le criticó su falta de ambición.