Imagen de archivo de la E10.

La Dirección General de Recursos Hídricos ha resuelto autorizar al Consell de Ibiza para ejecutar la ‘Actualización del proyecto constructivo primera fase de adecuación de la E-10’, en el tramo comprendido entre ses Figueretes y Can Misses.

En la resolución, desde la Conselleria del Mar y Ciclo del Agua otorgan una autorización por lo que respecta al dominio público hidráulico de las aguas superficiales, en sus zonas de protección y en zonas inundables o potencialmente inundables. Entre otras consideraciones, se exige que quede libre para el paso público de peatones la zona de servitud, a cinco metros desde el lateral del torrente, manteniéndose las medidas correctoras adecuadas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y bienes en caso de inundación o desbordamiento en el tramo afectado.

Además, se considera que el promotor es el responsable del proyecto y de la ejecución de la obra, así como de los daños que puedan producirse en el dominio público hidráulico o a terceros.
Contra la resolución puede interponerse un recurso de alzada en la Conselleria balear en el plazo de un mes después de haberse recibido la notificación.

La valoración

Desde el Consell d'Eivissa, el vicepresidente Mariano Juan quiso destacar ayer el cambio de actitud del nuevo Ejecutivo balear «que ha entendido que existen proyectos muy importantes para Ibiza y los ha resuelto con rapidez».

En este sentido, Juan puntualizó que durante la legislatura anterior Recursos Hídricos llegó a manifestar que quedaban «muchos meses» para resolver la solicitud del Consell. Tras conocer ahora la decisión de la dirección general, Mariano Juan señaló que junto al Ayuntamiento de Eivissa valorarán si se introducen modificaciones en el proyecto, siempre que éstas no impliquen volver a realizar toda la tramitación.

Por ahora, y puesto que el Consell conoció ayer la resolución de Recursos Hídricos, desde la institución insular no pudieron concretar plazos u otros detalles sobre la primera fase de la reforma de la E-10.
El pasado mes de agosto, desde el Consell de Ibiza recordaron que el proyecto de reconversión de la E-10 en un bulevar que una la zona de Can Misses con la ciudad estaba pendiente del informe preceptivo del departamento de Recursos Hídricos. La institución insular reconoció no poder sacar la obra a concurso al no haberse emitido este documento.

Cabe recordar que el proyecto original fue elaborado nada menos que en 2011. Una década más tarde, el Consell presentó ante el Ayuntamiento el que sería el proyecto definitivo, basado en la idea de convertir la E-10 en una calle más de la ciudad. La remodelación contempla, entre otras cuestiones, la creación de dos carriles por sentido, un gran bulevar central, un acceso subterráneo al Cetis y la conexión con todas las calles que hoy no tienen acceso directo al primer cinturón de ronda.
Este proyecto fue aceptado por Vila en 2021. Un año más tarde, el entonces alcalde, el socialista Rafa Ruiz, dio marcha atrás argumentando que quería añadir un gran aparcamiento subterráneo para 1.500 vehículos entre las rotondas de ses Figueretes y Joan XXIII. La también entonces presidenta del Govern, Francina Armengol, aplaudió el cambio y se comprometió a respaldar la obra mediante su introducción en el Plan Estratégico de Inversiones de las Islas.

El Consell de Ibiza puntualizó ayer que Vila nunca renunció oficialmente al proyecto planteado por la institución insular, llegando a solicitar al gobierno de Rafa Ruiz hasta en dos ocasiones la renuncia por escrito, aunque nunca se obtuvo respuesta.

El proyecto de reconversión de la E-10 del Consell está presupuestado en cerca de 10 millones de euros. En el momento de su aprobación, la institución insular planteó que fuera financiado con los fondos del convenio de carreteras con el Estado. Esta vía, sin embargo, se cerró cuando el Govern de Armengol negoció con el Gobierno central un nuevo acuerdo de financiación que dio al traste con los convenios que se firmaban tradicionalmente con las instituciones insulares.