Club Náutico de Ibiza. | Moisés Copa

La Asociación de Clubes Náuticos de Baleares (ACNB) ha denunciado este miércoles que la situación de aquellas entidades ubicadas en zonas de Puertos del Estado es «desesperada», por lo que se requieren cambios legales «urgentes» que reconozcan la función social y deportiva de los clubes, evitando la gentrificación «definitiva e irreparable» de sus instalaciones.

La ACNB aseguró representar a 24 entidades deportivas y a 12.000 familias de Baleares, reconociendo no poder ocultar su «profunda preocupación» por la situación de precariedad en la que se encuentran en estos momentos instituciones tan relevantes como el Club Náutico de Ibiza, el Club Marítimo de Mahón o el Real Club Náutico de Palma. Ante la falta de una acción política y legislativa decidida para dar respuesta a las demandas de la ciudadanía, temen que la situación desemboque en la pérdida inminente del patrimonio deportivo, social y cultural que los clubes representan.

En un extenso comunicado, la Asociación lamentó que el Gobierno central, a través del Ministerio de Transportes y del organismo Puertos del Estado, no puede permanecer de brazos cruzados mientras sus normas y los pliegos de los concursos que convoca para la gestión del espacio público están propiciando que entidades mercantiles sin ninguna experiencia deportiva ni social puedan optar en condiciones ventajosas a la explotación de los históricos clubes náuticos.

Este colectivo recordó que Puertos se comprometió a tomar cartas en el asunto, asumiendo que los clubes desempeñan una función insustituible y que, por tanto, se deben articular medidas que garanticen su continuidad dentro del marco de la legislación española. «Aquella promesa, que dio lugar al llamado Pacto de la Palma, debería mantener su plena vigencia a día de hoy pero, por desgracia, no se ha visto traducida en hechos. El tiempo corre y los clubes no pueden esperar», declararon los responsables de la ACNB.

Según expresaron también, no dudan ni de la palabra ni de las buenas intenciones de los dirigentes de Puertos del Estado, aunque consideraron necesario hacer un llamamiento público para que las modificaciones legales acordadas se lleven a cabo sin más demora o, de lo contrario, no quedarán clubes náuticos que proteger.

Ello también supondría no escuchar el mandato de los ciudadanos de Mallorca, Menorca e Ibiza que han expresado su deseo de conservar estas entidades a través de manifestaciones multitudinarias. Cabe recordar, en este sentido, el acto celebrado hace unos días en el Club Náutico de Ibiza, comentaron desde la ACNB.

La Asociación explicó que el Parlament aprobó el pasado mes de diciembre mediante una proposición no de ley instar a Puertos del Estado a que iniciara el procedimiento de modificación legislativa para la protección de estas entidades. «El Gobierno central no puede hacer oídos sordos a esta prescripción emanada de la cámara legislativa que representa la voluntad de los ciudadanos, teniendo en cuenta, además, que Baleares debería tener transferidas las competencias de la náutica de recreo de acuerdo a su Estatuto de Autonomía», afirmaron.

La entidad reiteró que Puertos «no puede ignorar por más tiempo una singularidad a la que la legislación nacional, hecha a medida de empresas comerciales sin ningún interés por la conservación de la náutica social, es incapaz de dar respuesta con su articulado actual».

Las federaciones cuya actividad se desarrolla en las instalaciones de los clubes han sido muy claras en sus reiteradas advertencias: sin los náuticos es imposible la pervivencia del deporte, recordando que la vela y el piragüismo son las dos disciplinas que más medallas olímpicas han proporcionado al deporte español, un hecho que debería haber motivado una movilización de los servicios jurídicos del Ministerio de Transportes para adaptar la ley a la realidad social «y no a la medida de cualquier empresa con intenciones especulativas», concluyó la Asociación.