La juez del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, ha absuelto a un joven barcelonés de 28 años que fue detenido por la Guardia Civil en Formentera en posesión de 84 gramos de hachís y para quien el Ministerio Público pedía dos años de cárcel por tráfico de drogas. La juez considera que no se ha probado que el hachís era fuera para la venta y considera más viable la versión del acusado, defendido por la abogada Alicia Hernández.
Quedó demostrado, a través de una analítica, que el joven es consumidor habitual de esta droga. Los 84 gramos estaban en una sola pieza, y no fraccionados para su venta. No llevaba billetes 'pequeños', que suele ser un indicativo de que la persona se dedica a la venta al por menor y, además, tampoco se le incautaron los utensilios típicos de la venta al menudeo, como balanzas de precisión, bolsitas o plásticos para guardar la droga.
«Me declaro portador de una cantidad excesiva [asegura que consume entre 5 y 10 gramos diarios], pero creo que [la petición de] condena también es excesiva», dijo a la juez el acusado.
Explicó que como pensaba pasar un mes en las Pitiüses, antes de viajar hizo acopio de hachís en Barcelona.
Mercado negro
«No quería buscar [hachís] aquí, no me gustaba la idea de meterme en el mercado negro», explicó el día del juicio, que se celebró el 27 de abril.
El Supremo sitúa el límite en 50 gramos
El Tribunal Supremo (TS) sitúa el límite de hachís para que pueda ser considerado para consumo propio en 50 gramos. En la sentencia, la juez recuerda la jurisprudencia del TS referente a las excepciones esta regla. Por encima de la norma se sitúa la necesidad de probar que la droga incautada estaba destinada a la venta a terceras personas.
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